Sociedad

El legado oscuro de Carlos Manrique Carreño, responsable de la estafa piramidal más sonada en América Latina

Durante los años 80, miles de peruanos perdieron los ahorros de sus vidas bajo las estafas del 'Cheverengue'. En horas de la madrugada del 10 de julio, Carlos Manrique falleció en un hospital de Essalud.

El CLAE estafó a más de 20.000 peruanos. Foto: LR/Andina
El CLAE estafó a más de 20.000 peruanos. Foto: LR/Andina

Carlos Manrique Carreño, también conocido como 'Cheverengue', fue el fundador del Centro Latinoamericano de Asesoramiento Legal (CLAE), una empresa que implementó una de las estafas piramidales más grandes de América Latina. Manrique engañó a más de 20.000 peruanos en las décadas de 1980 y 1990, prometiéndoles incrementos significativos en sus ahorros a cambio de inversiones en un esquema fraudulento.

A partir de 1978, inició su carrera empresarial con la fundación de una agencia dedicada a la administración de empresas. Con el tiempo, su visión se transformó en una maestra de las estafas, utilizando sus habilidades de persuasión para atraer a miles de personas hacia su esquema piramidal (ponzi) en el CLAE. Esta capacidad le permitió captar anualmente hasta 200 millones de dólares hasta el colapso de su operación a principios de los 90.

¿Cuál fue el legado oscuro de Carlos Manrique?

Carlos Rema Manrique Carreño nació en Cusco y estudió en escuelas públicas en su ciudad natal y en Lima. A finales de los años 50, abrió con su madre una academia para ofrecer cursos de matemáticas y música, la cual más tarde evolucionaría hacia un centro de asesoramiento de tesis.

Sin embargo, su interés en el mundo empresarial creció con el tiempo, y a inicios de los años 80 comenzó a captar los ahorros de las personas bajo el pretexto de invertirlos en el Centro Latinoamericano de Asesoramiento Legal (CLAE), prometiendo pagarles altos intereses. Manrique se convirtió en un personaje reconocido en el ámbito empresarial, recibiendo múltiples títulos como "Empresario del Año" y "Personaje del Año". Incluso, la revista Interamericana de Derecho Aéreo y Turismo le otorgó un premio por su "destacada labor como empresario", según la BBC.

Durante la crisis económica provocada por la inflación en el primer gobierno de Alan García, el CLAE ofrecía un interés del 100 % sobre los ahorros, atrayendo a una gran variedad de personas que buscaban una oportunidad financiera. Jubilados, miembros retirados de las fuerzas armadas, artistas, futbolistas y amas de casa, entre otros, depositaron ciegamente sus ahorros en busca de un futuro mejor bajo las promesas de Manrique.

Con el tiempo, la empresa se transformó en un esquema piramidal. Al dejar de recibir nuevos depósitos, el flujo de dinero se paralizó, lo que impidió cumplir con las promesas hechas a sus clientes. Manrique se mantuvo en la clandestinidad y huyó a Estados Unidos, donde la Interpol lo capturó en Miami en 1994. Fue acusado de estafa y delitos financieros, y el Poder Judicial lo sentenció a ocho años de prisión, de los cuales cumplió hasta su liberación en 2001.

Carlos Manrique, el hombre detrás del CLAE, falleció en la madrugada del 10 de julio de 2024 en el Hospital Ramón Castilla II de EsSalud en el Cercado de Lima. Su muerte cierra un capítulo oscuro en la historia de miles de peruanos que sufrieron las consecuencias de su estafa.

¿Qué hizo Carlos Manrique Carreño?

  • Fundación del CLAE: durante los años 80 la asesoría en administración de negocio cambio para funcionar bajo el esquema piramidal. La promesa de altos rendimientos en un contexto de inestabilidad económica en el Perú hizo que muchas personas invirtieran sus ahorros en la empresa.
  • Esquema piramidal: la empres cambia bajo un esquema piramidal o Ponzi. Es decir que los rendimientos prometidos a los inversionistas antiguos se pagaban con el dinero de nuevos inversionistas. No había inversiones reales generando ganancias; todo dependía del flujo continuo de nuevos fondos.
  • Engaño Masivo: Manrique convenció a miles de personas para invertir en su empresa a través de campañas publicitarias masivas. El CLAE tenia 20 locales a nivel nacional, 17 se encontraban distribuidos por todo Lima, mientras los otros en Chiclayo, Tacna y Trujillo
  • Colapso del CLAE: a principios de los años 90, el esquema colapsó cuando el flujo de nuevos inversionistas se redujo y el CLAE no pudo cumplir con sus promesas de pago. En 1993, el gobierno peruano intervino y clausuró la empresa. Manrique fue arrestado y, tras un largo proceso judicial, condenado a varios años de prisión. Sin embargo, retornó nuevamente a la cárcel en el 2008 y el 2011 por el mismo delito.
  • Impacto Social y Económico: 20.000 personas perdieron todos sus ahorros. Fue una de las mayores estafas financieras en la historia de América Latina y dejó una marca en la memoria colectiva del Perú.