¿Qué pasó con Rodrigo Ventocilla? Todo lo que se sabe sobre el joven trans que murió en Indonesia
¿Qué sucedió en Indonesia? ¿Qué dijeron las autoridades ante su muerte? Conoce todo sobre el caso que ha conmocionado al Perú y que no recibió apoyo en primera instancia.
En el 2015, Rodrigo Ventocilla y Sebastián Marallano se conocieron. Luego de varios años de relación y luchas por el reconocimiento de la comunidad LGTBIQ+, ambos viajaron a Chile para casarse este 2022. Este último 6 de agosto, decidieron irse de luna de miel a Bali, en Indonesia.
Todo estaba planeado. Luego de su luna de miel, Ventocilla retornaría a estudiar su segundo año de la maestría en Administración Pública en la Universidad de Harvard. Sin embargo, todo quedaría trunco tras la muerte del joven trans en dicho país.
Detención en Indonesia
Al llegar al aeropuerto de Denpasar-Ngurah Rai, Ventocilla fue detenido luego de ser discriminado y acusado de ser un traficante de drogas. Esto pese a que contaba con la prescripción médica para su tratamiento de salud mental.
Ese mismo día, en horas posteriores, Sebastián llegó a Bali e intentó auxiliar a su pareja, pero esto no le fue permitido y lo retuvieron. La familia de Rodrigo Ventosilla denunció que la Policía de Bali exigió “cantidades exorbitantes de dinero” a cambio de la liberación de los dos peruanos.
Juntos. Rodrigo Ventocilla junto a Sebastián Marallano el día que se casaron en Chile. Las causas de la muerte del primero en Bali aún no han sido reveladas. Foto: difusión
Durante los próximos tres días, los parientes tenían poca comunicación hasta que fueron informados de que ambos ciudadanos sufrieron una descompensación dentro de su celda. Ventocilla estuvo en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Dos días después, lo trasladaron a otro nosocomio. Lamentablemente, Rodrigo Ventosilla falleció.
La necropsia nunca se pudo realizar en ese país, por lo que aún no se sabe qué pasó.
Inacción de las autoridades en Perú
Durante este período, la Cancillería tuvo un papel ausente. No se comunicaba con la familia ni mucho menos salía a respaldarlos.
En un primer comunicado, dicha entidad no dedicó ni un apoyo o lamento en los deudos. Incluso, negó la versión de la familia.
“La detención de los dos connacionales en Indonesia no habría correspondido a actos de discriminación racial y transfobia. De acuerdo con lo informado por las autoridades indonesias a la familia de los implicados y a la Sección Consular de la Embajada del Perú en dicho país, la detención se habría producido debido a que la aduana del aeropuerto habría encontrado entre las pertenencias de uno de ellos, además de pastillas con su respectiva prescripción médica, objetos que contenían restos de cannabis, así como diversos productos elaborados con dicha sustancia”, señaló.
Luego de varios días, emitieron un nuevo pronunciamiento donde los respaldaron. No obstante, la familia y amigos ya mostraban su sentir en los exteriores de la Cancillería. Incluso, la defensa legal anunció que presentaron una denuncia por el delito de tortura y violación de derechos humanos en contra de funcionarios indonesios y peruanos que están implicados en la muerte del joven activista trans.
“Se ha tomado la decisión de interponer esta denuncia en la medida en que creemos que hay elementos perfectamente razonables e indiciarios de la comisión de estos delitos. Hay una contundencia probatoria que haremos pesar. Esperamos que el Ministerio Público abra la investigación y realice las diligencias preliminares que apunten al esclarecimiento del caso lo más pronto posible”, señaló Arbizú a La República.
Investigación preliminar y retorno de los restos
El último 1 de septiembre, la Tercera Fiscalía Penal Supraprovincial Especializada en Derechos Humanos y Delitos de Terrorismo dispuso abrir investigación preliminar por presunto delito contra la humanidad, en la modalidad de tortura. El plazo de la investigación será de ocho meses en promedio.
Hasta la fecha, los restos de Rodrigo Ventocilla no han sido entregados a la familia. La abogada Brenda Álvarez indicó que existe una demora en la entrega del cuerpo del joven fallecido pese a que llegó a las 5.30 a. m. del 2 de septiembre.
Aún todo es un misterio.