Jefe del INEI se lava las manos tras filtración de prueba docente
Contradicción. Dijo que en la logística se cumplieron medidas de seguridad y que ningún aplicador tuvo acceso al contenido. Sin embargo, un informe interno reconoce pérdida de un cuadernillo.
Nadie asume responsabilidades tras una semana de haberse reportado algunas irregularidades durante la aplicación de la prueba de nombramiento que rindieron más de 250 mil docentes a nivel nacional.
Ante la Comisión de Educación del Congreso, el jefe del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), Dante Carhuavilca, dejó entrever que desde su institución –como operador logístico– no se habría dado la supuesta filtración, ya que no hubo ninguna negligencia durante la impresión y el traslado de la evaluación.
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“El 23 de setiembre, el Minedu entregó al INEI cuatro sobres lacrados y en ese mismo instante, delante del Minedu y del notario público, le entregamos a la imprenta para que realice la impresión de los cuadernillos de la prueba y las fichas de respuestas que son personalizados, con un tipo de microchip y con códigos de barras”, explicó.
Luego, dijo, el proceso de impresión duró 45 días (entre el 23 de setiembre y el 6 de noviembre). “Todo fue grabado las 24 horas. Inclusive nosotros tenemos un acta de verificación de medidas de seguridad de las cámaras. Son 42 trabajadores del INEI que supervisaron y 242 trabajadores de la imprenta”.
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Carhuavilca señaló que después el operador logístico del Banco de la Nación trasladó a sus bóvedas las cajas embaladas y lacradas con los exámenes. Finalmente, llevó los materiales a las sedes de evaluación el día 13 de noviembre. “Ningún trabajador del INEI ha tenido acceso al contenido de la prueba, ni yo lo he visto. Recién el aplicador accede al cuadernillo en el momento en que deslacra el paquete y les entrega a los docentes”, dijo.
También precisó que durante el día del examen se apersonaron fiscales en tres locales de aplicación (dos en Tarapoto y uno en Andahuaylas) con hojas sueltas con preguntas, a fin de contrastar si eran las mismas de los cuadernillos. Así, realizaron el acta y continuaron su investigación. “Desde el 2008, el INEI viene participando como operador logístico de la prueba a pedido del Minedu. Hemos aplicado exámenes a cerca de un millón y medio de docentes entre el 2014 y 2019 (...) Siempre ha habido denuncias, pero no hubo evidencias de que hayan sido filtraciones verdaderas”.
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Todo eso dijo el jefe del INEI. No obstante, lo que no informó fue sobre la existencia de un informe interno de su institución donde se reconoce que, antes de aplicar la prueba, detectaron que faltaba un cuadernillo. Así lo reveló el portal periodístico El Foco, el cual accedió al citado documento, del miércoles 17 de noviembre, donde se recogieron incidencias durante el proceso. “Se reportaron seis casos de falta de instrumentos de evaluación (un cuadernillo de prueba y cinco fichas de respuesta), por lo que se procedió según los protocolos del Minedu”, se lee. Esto contradice la versión dada por Carhuavilca.
Ministro en silencio
A la cita no acudió el ministro de Educación, Carlos Gallardo. Él, en un inicio, había asegurado su presencia, pero ayer avisó que no iría porque aún estaba recogiendo evidencias sobre las supuestas irregularidades.
“Está a la espera de dos nuevos informes del INEI”, señaló el presidente de la Comisión de Educación, Esdras Medina, quien dijo que recogió denuncias no solo en Tarapoto y Andahuaylas sino también en Cusco, Lambayeque, Lima y Junín.
En el Congreso esperan respuestas del Minedu, ya que el INEI se lavó las manos.