Política

Exjefe del CCFFAA dice que ordenó “cese al fuego”, pero militares siguieron matando en Ayacucho

La exdefensora del Pueblo, Eliana Revollar, reveló en declaraciones a la fiscalía que habló con el general EP Manuel Gómez de la Torre cuando se reportaban dos fallecidos y que este garantizó que cesaría los disparos de los militares. Pero los efectivos continuaron usando su armamento, causando 10 muertos.



El general Gómez de la Torre dijo a la fiscalía que ordenó que cesaran los disparos, pero no sucedió así.
El general Gómez de la Torre dijo a la fiscalía que ordenó que cesaran los disparos, pero no sucedió así.

El exjefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (CCFFAA), general de división EP (r) Manuel Gómez de la Torre Araníbar, pudo haber detenido las acciones de los efectivos del Ejército que salieron a sofocar las protestas del 15 de diciembre de 2022 en Ayacucho, y  así evitado la muerte de varios manifestantes, según se desprende de las declaraciones de la exdefensora del Pueblo, Eliana Revollar Añaños.

Revollar manifestó ante la fiscal encargada del caso, Mirela Coronel Molero, que habló con el general Gómez de la Torre y le avisó que la represión indiscriminada con armas de fuego había causado fallecidos y lo instaba a que dispusiera el cese al fuego.

Sin embargo, las violentas acciones del Ejército continuaron, dejando un saldo de 10 muertos por armas de fuego.

En primera persona

“A las 16 horas y unos minutos recibí la llamada del jefe de la Defensoría del Pueblo de Ayacucho, Gustavo Pacheco Villar, indicando que habrían dos personas fallecidas y muchos heridos. (...) Le pregunté si tenía certeza de los fallecidos y me dijo que sí, se hablaba de dos fallecidos. Además, me envió vídeos e imágenes por WhatsApp. (...) En esas circunstancia solicita mi intervención, y entonces yo pido a Jackelyn Valverde Romero, asesora del despacho de Defensoría del Pueblo, que pueda ponerme al habla telefónicamente con el ministro de Defensa de ese entonces, Alberto Otárola, y con el jefe del CCFFAA, general Manuel Gómez de la Torre. A las 17 y 11 (Valverde) dejó un mensaje al edecán de Gómez de Torre, que decía: (...) ‘La defensora necesita hablar urgente con el general Gómez de la Torre por lo ocurrido en Ayacucho”, dijo Eliana Revollar, según el acta de su declaración ante la fiscalía.

El testimonio de la exdefensora del Pueblo es relevante porque el general Gómez de la Torre, quien como jefe del CCFFAA estaba en condiciones de ordenar el cese al fuego, tuvo conocimiento que elementos de la 2ª Brigada de Infantería del Ejército acantonada en Ayacucho habían comenzado a matar a manifestantes.

 El testimonio de la exdefensora Eliana Revollar para identificar la responsabilidad del general Gómez de la Torre.

El testimonio de la exdefensora Eliana Revollar para identificar la responsabilidad del general Gómez de la Torre.

Cuando, finalmente, el general Gómez de la Torre se comunicó con Eliana Revollar, tratando de explicar el registro de fallecidos durante las protestas en Ayacucho,  el entonces jefe del CCFFAA alegó que los autores de los disparos pertenecían a una “patrulla desprolija”, y que hicieron uso de sus armas de reglamento porque los manifestantes “los rodearon”, justificando la actuación de los uniformados.

"Patrulla desprolija"

“Pasada las seis de la tarde me devolvió la llamada el general Gómez de la Torre y me dio una explicación similar a la que me había dado el ministro de Defensa (Alberto Otárola). Que se trataba de una patrulla desprolija, que no tenía protección, y que fue rodeada en la parte exterior del aeropuerto (de Ayacucho). También recuerdo que me dijo que eran personas que estaban patrullando a pie y que habían cumplido con el manual de los derechos humanos y el Decreto Legislativo 1095 (Reglas de empleo y uso de la fuerza por parte de las FFAA) (...) En ese momento solo hablábamos de dos fallecidos y decenas de heridos. Y me dijo que la situación estaba bajo control”.

Las evidencias acopiadas por la fiscal Mirela Coronel más bien indican que la “patrulla desprolija” continuó disparando a diestra y siniestra sin que ningún alto mando se lo impidiera, incluyendo al exjefe del CCFAA, general Manuel Gómez de la Torre. 

Eso explica por qué, luego que la exdefensora del Pueblo alertó a Gómez de la Torre de que los militares estaban tirando a matar con sus fusiles Galil, causando 2 muertos, al final de la jornada el número de fallecidos subió a 10.

“(Me dijo que) estábamos en estado de emergencia. Le señalé que aún en dicha situación, el rol de la Defensoría es garantizar la vigencia de los derechos humanos. Y que deberían dar una señal de responsabilidad, de investigación, incluso de cambiar al jefe que estuvo a cargo del operativo, luego de la violencia vivida en Ayacucho. Él (Gómez de la Torre) asintió e indicó que la situación estaba bajo control”, señaló Revollar.

La otra versión

La declaración de la exdefensora del Pueblo contradice gravemente la declaración que dio a la fiscalía el general Manuel Gómez de la Torre, quien afirmó que se enteró de los muertos en Ayacucho por la prensa: “Tomé conocimiento del primer fallecido a través de los medios de comunicación y el informe de la DIRESA (Dirección Regional de Salud de Ayacucho), aproximadamente 17:30 horas del 15 de diciembre de 2022. Y de inmediato me comuniqué con el Comando Operacional del Este (COE), pero no tenía conocimiento de este hecho (de los fallecidos)”.

 Las evidencias demuestran que los militares siguieron disparando pese a supuesta orden de no usar el armamento.

Las evidencias demuestran que los militares siguieron disparando pese a supuesta orden de no usar el armamento.

Gómez de la Torre aseguró que dispuso que no siguieran disparando.

“Dispuse que averigüe y me de cuenta. Posteriormente, (me dijo que), efectivamente, a través de los medios de comunicación, se estaba difundiendo la noticia de que había un fallecido. Pero no teníamos información que había sido producto de la acción de nuestras fuerzas que estaba al pendiente. (...) Apenas tomamos conocimiento del primer fallecido (...) me comuniqué con el comandante del Comando Operacional del Este (general Miguel Gonzáles Bohórquez), para que me informe qué es lo que estaba sucediendo. (...) Se dispone de inmediato al Comando Operacional del Este que cese el uso de las armas, y su empleo solamente de manera extraordinaria, a menos que sea una situación extrema y en la que esté en peligro la vida o integridad física del personal, como lo especifica el Decreto Legislativo N° 1095”.

Por estas razones, la fiscal Mirela Coronado formalizó y continuó la investigación preparatoria contra los generales Manuel Gómez de la Torre y Miguel Gonzáles Bohórquez, además del jefe de la 2ª Brigada de Infantería de Ayacucho -a la que pertenecían los efectivos-, general Jesús Vera Ipenza, entre otros, como presuntos autores de los delitos de homicidio calificado con alevosía.