El Tribunal Supremo de EE.UU. rechazó hoy, lunes, una demanda colectiva por discriminación sexual en Wal Mart , en lo que supone una clara victoria para la empresa en un caso que ha convertido en un símbolo en la lucha contra la discriminación laboral en este país. La demanda en esta cadena de tiendas minoristas , la mayor del mundo, fue iniciada en 2001 por seis mujeres que denunciaron discriminación tanto en la capacitación como en las promociones y en las remuneraciones , si bien se sumaron a ellas otras 500 mil empleadas . En un momento determinado del proceso judicial , las demandantes lograron que un juez convirtiera la denuncia en una demanda colectiva , con lo que se hizo extensible a 1,6 millones de empleadas o exempleadas de la cadena. No obstante, los jueces del Supremo dictaminaron hoy que en este caso no cabía una demanda colectiva , en línea con lo que había argumentado este gigante de la distribución comercial. "Nos complace el dictamen de hoy y creemos que el tribunal tomó la decisión correcta", señaló en un comunicado la vicepresidenta de Wal Mart , Gisel Ruiz , quien recordó que " Wal Mart ha tenido durante muchos años políticas muy enérgicas contra la discriminación ". Por unanimidad en algunos aspectos, y con disensiones en otros, el Supremo dictaminó que los abogados de las demandantes no habían probado que existiese una política general en Wal Mart que condujera a la discriminación por género. La querella, si se hubiese aceptado como demanda colectiva, podría haber conducido a compensaciones e indemnizaciones por miles de millones de dólares. El juez Antonin Scalia , que escribió el veredicto de 27 páginas , indicó que las demandantes no tenían suficientes razones en común para que las demandas se convirtieran en una sola querella colectiva. Las demandantes deberían presentar pruebas significativas de que Wal Mart opera bajo una política general de discriminación sobre remuneraciones y promociones que aplica en todas sus tiendas y a todas sus empleadas. La jueza Ruth Bader Ginsburg , que escribió el disenso parcial al cual se sumaron Stephen Breyer, Sonia Sotomayor y Elena Kagan , indicó que las demandantes podrían proceder con su querella bajo un enfoque legal diferente de la demanda colectiva. El fallo de inmediato benefició a Wal Mart con un aumento de la cotización de sus acciones en la Bolsa de Nueva York. El caso ha sido una de las disputas recientes sobre relaciones laborales de más relevancia, en parte porque los magistrados del Supremo no habían manejado un caso sobre certificación de demandas colectivas en más de una década. (Washington, EFE)