Argentina: autores de atentado contra expresidenta Cristina Fernández de Kirchner condenados a prisión
En 2022, Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte intentaron asesinar a la expresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, pero el arma no llegó a disparar.
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Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte, acusados de intentar asesinar a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner en 2022, fueron condenados a 10 y 8 años de prisión, respectivamente, poniendo fin a un juicio que conmocionó a toda Argentina.
Todo comenzó el 1 de septiembre de 2022, cuando Sabag Montiel (38) se infiltró entre los simpatizantes que aguardaban frente al domicilio de la entonces vicepresidenta y apuntó a su cabeza, accionando el arma dos veces sin que los disparos se efectuaran.
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Pareja fue encontrada culpable
Un tribunal de Buenos Aires condenó a Sabag Montiel por intento de homicidio agravado por el uso de un arma de fuego, así como por otros delitos vinculados a la tenencia de pornografía infantil. La jueza precisó que la pena total asciende a 14 años de prisión.
Por su parte, Brenda Uliarte (26), entonces pareja de Sabag Montiel, fue condenada a ocho años de prisión por ser considerada “partícipe necesaria” del atentado, según lo indicó la magistrada del caso.
Antes de escuchar la sentencia, Sabag Montiel hizo referencias confusas a otros casos políticos y habló de conspiraciones. "Toda esta causa estuvo armada y eso se sabe", afirmó, asegurando además que no había recibido pago alguno por sus acciones.
"Si me piensan desaparecer, es algo que deben considerar con cuidado", agregó. Por su parte, Uliarte se negó a hacer declaraciones.
Quiso matarla como un 'acto de justicia'
A lo largo del juicio (iniciado en junio del 2024), Sabag Montiel admitió que había querido matar a Cristina Fernández de Kirchner como un acto de justicia ya que, según él, ella es corrupta, roba y hace daño a la sociedad.
El atentado a Cristina Fernández de Kirchner movilizó a miles de personas que salieron a las calles en apoyo a la expresidenta (2007-2015) de centroizquierda.
"El caso refrescó la oscura memoria de que se puede apelar a la violencia para resolver diferencias políticas", señaló Facundo Cruz, analista y consultor a AFP.
"Se hizo palpable que en el siglo XXI puede ocurrir algo que se creía que estaba desterrado de las prácticas argentinas", añadió el analista en alusión al asesinato de militantes políticos durante la dictadura cívico-militar (1976-1983).
Cristina Fernández de Kirchner está en prisión domiciliaria
El atentado se produjo al inicio del juicio contra Cristina Fernández de Kirchner por corrupción, proceso que culminó en diciembre de 2022 con su condena a seis años de prisión e inhabilitación política perpetua.
Durante ese proceso, cientos de personas acudían al domicilio de la expresidenta para manifestarle su solidaridad. El tumulto sirvió de pantalla para Sabag Montiel tratara de asesinarla.
En 2025, la Corte Suprema confirmó la condena y desde entonces Cristina Fernández de Kirchner está recluida en prisión domiciliaria en un apartamento en Buenos Aires, desde cuyo balcón ocasionalmente saluda a sus simpatizantes.
Tercer imputado fue declarado inocente
Por otra parte, la justicia argentina absolvió a un tercer imputado, Nicolás Carrizo, que había sido acusado de planificar el ataque. "Estos tres años nadie me los va a devolver", lamentó.
Nicolás Carrizo era el jefe de Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte, a quienes contrataba como vendedores callejeros de algodón de azúcar.
El pedido de Cristina Fernández de Kirchner de investigar en este juicio a los supuestos financistas del atentado fue desestimado y se investiga como una causa separada.
"Hay un intento de Kirchner de mantener el tema en agenda, haciendo alusión a lo sucedido y recordándolo. Rememorar lo sucedido y pedir justicia es parte de su capital político: haber sobrevivido", señaló el analista Cruz.



























