La rara imagen de Saturno tomada de los momentos finales de la sonda Cassini
Antes de ser absorbida por la gravedad del gigante planeta, la nave pudo captar una increíble aurora sobre él.
La sonda Cassini, lanzada por la NASA, la ESA y la ASI, orbitó Saturno durante 13 años hasta que su misión llegó a su final en septiembre de 2017. Durante su último recorrido, la acercaron para que rodee muy de cerca al planeta, de tal manera que pueda captar las imágenes más precisas posibles.
Estos datos finales fueron analizados por científicos de la Universidad de Lancaster (EE. UU.), quienes han revelado imágenes de las auroras ultravioletas de Saturno en una resolución nunca antes observada.
El estudio, publicado en Geophysical Research Letters y JGR, explica que las auroras de Saturno son generadas por la interacción del viento solar, una corriente de partículas energéticas emitidas por el Sol con el dinámico campo magnético del planeta gaseoso.
Aurora austral de Saturno. Imagen: NASA.
Así como en la Tierra, las auroras de Saturno se ubican en sus regiones polares. Son muy activas: pulsan y parpadean a medida que suceden diferentes procesos dinámicos en el entorno de plasma del planeta.
“Sorprendentemente, muchas preguntas que giran en torno a las auroras de Saturno siguen sin respuesta, incluso después del éxito sobresaliente de la misión Cassini”, indica el autor principal de la investigación, Alexander Bader.
“Tenemos algunas ideas sobre cuál podría ser su origen, pero aún queda mucho análisis por hacer”, explica.
En el último tramo de su misión, la sonda Cassini se acercó tanto que su órbita pasó entre Saturno y sus anillos. Imagen: NASA.
¿Qué producen las auroras en Saturno?
Las auroras de Saturno, como las de Júpiter, se forman por partículas mucho más energéticas que las de la Tierra, según los primeros resultados de las mediciones realizadas la sonda Cassini. No obstante, se determinó que los tres planetas comparten similares mecanismos físicos en la generación de sus auroras.
Las partículas energéticas causan aquellos espectáculos de luces alrededor de los polos de los planetas. Pero estos procesos se originan muy lejos de la superficie, en la magnetósfera, donde las líneas de campo magnético se doblan y las nubes de plasma interactúan entre sí.
Si bien la misión de la sonda Cassini concluyó hace más de dos años, los datos que obtuvo siguen sorprendiendo a los científicos quienes, poco a poco, están comprendiendo fenómenos como estos en los planetas gigantes de nuestro sistema solar.