Un grupo de monjas peruanas que se encuentran en la franja de Gaza piden ayuda para los ciudadanos que continúan en dicho lugar, donde se registra la guerra entre Israel y el movimiento islamista Hamás. Las religiosas se pronunciaron desde su parroquia acerca de la situación que atraviesan las personas que están en esta zona de conflicto. Ellas indicaron que requieren "agua, alimentos, combustibles, medicamentos" y más.
"En nombre de todos que estamos en la parroquia, la mayor parte de cristianos de Gaza queremos agradecerles por vuestra constante preocupación y oraciones. La situación en la franja de Gaza es crítica con bombardeos que suceden sin cesar. En toda la franja falta de todo, desde agua, alimentos, combustible, medicamentos, abrigo", señaló una de las monjas.
"Todos los religiosos rezamos sin cesar por la paz, el fin de la guerra y para que puedan entrar todas las ayudas para los necesitados que estén en el norte o sur de gaza. Agrademos la cercanía del santo padre y agradecemos a todos los que rezan y trabajan por la paz", añadió.
PUEDES VER: Metro de Lima: usuarios destruyen mobiliario de estación Bayóvar por incidente en sistema de ingreso
Cabe señalar que las monjas María del Pilar y María del Perpetuo Socorro Llerena Vargas aún continúan en el norte de la Franja de Gaza, debido a que han decidido quedarse para ayudar a las personas que estén heridas, además a los niños, las personas discapacitadas, los ancianos y a todos los ciudadanos que se encuentren en el lugar.
"Ellas consideran que su deber religioso y su vocación de apostolado es permanecer en la Franja de Gaza y ya no desean ser evacuadas a Egipto", indicó el embajador el Perú en Egipto, José Guillermo Betancourt.
PUEDES VER: ¿Por qué no puedo recargar tarjetas de Lima Pass y de Metropolitano en Tambo? ATU explica
Por su parte, María del Pilar Llerena indicó que los ciudadanos no tienen agua y reveló que se abastecen de este recurso natural de un pozo, además que tampoco cuentan con luz. Incluso, informó acerca de la atención que le brinda a las personas en situación de vulnerabilidad.
“Recibimos a los heridos leves para ser atendidos. Somos casi 700 fieles, entre los que se encuentran las hermanas de la Madre Teresa, con 50 niños discapacitados, las hermanas de nuestra Señora del Rosario y el padre de nosotras, del Verbo Encarnado. Atendemos a ancianos, enfermos, niños… a todos”, indicó.