Un operativo conjunto de la Dirección contra la Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes y de la Fiscalía permitió, tras varios meses de investigaciones, desmantelar una estructura criminal que aprovechaba las difíciles condiciones económicas de jóvenes colombianas para ofrecerles trabajos en Lima que, en realidad, eran actividades de explotación sexual comercial.
Dos hombres fueron detenidos en flagrancia delictiva en San Martín de Porres y formarían parte de la banda criminal Los Tratantes del Caribe. También se rescató a dos mujeres, una de 22 años y otra de 15 años, que eran retenidas en la calle Antonio Machado, mza. E, lote E1, urbanización Virgen de Fátima.
Las autoridades detectaron esta red gracias a las declaraciones entregadas por una mujer que escapó del encierro, el trato inhumano y los vejámenes a los que era sometida por el venezolano Gredson Daniel Ghersi Galazzo (24) y José Róger Bravo Morelo (24), de nacionalidad colombiana.
Los testimonios y pruebas recopiladas por los investigadores permitieron establecer que la banda aprovechó las dificultades económicas de las víctimas y les ofreció una oportunidad de ganar dinero y así salir de la crisis financiera que afrontaban en su país.
Incluso a la menor de edad le proporcionaron una cédula de identidad falsa de una mujer adulta.
Una vez captadas en su país con la falsa promesa laboral, las traían a Lima y eran “acogidas” en una habitación acondicionada en el cuarto piso (azotea) del referido inmueble, lugar donde, amenazadas de muerte, se encontraban bajo el dominio y control de los integrantes de la banda criminal, explicó el general Ulises Guillén Chávez, jefe de la DIRCTPTIM PNP.
Por su parte, el coronel Manuel Díaz Barco, a cargo de las investigaciones, señaló que los dos extranjeros detenidos se dedicaban a explotarlas sexualmente bajo la modalidad de las multadas. Esta consiste en presionarlas con una ‘deuda’ originada por el costo de pasajes desde su país de origen, alimentación, vestimenta, alojamiento, etc.
Las amenazaban para cubrir el pago de la supuesta deuda ascendente a S/ 15.000 y eran obligadas a prestar servicios sexuales en diversos espacios públicos de la zona norte de Lima, conocidos como “plazas”, y el dinero que recaudaban, en su totalidad, era entregado a sus explotadores.
PUEDES VER: ¡Chamba sí hay! Ofertas de trabajo del 3 al 6 de noviembre con sueldos de hasta 7.800 soles
La tarde del sábado fue detenido Gredson cuando llegaba al inmueble en una mototaxi con la finalidad de proveer de alimentos a las víctimas. Tres horas después fue intervenido José Bravo en una motocicleta lineal. Iba a recoger el dinero producto de los servicios brindados por las víctimas la noche anterior.
Las dos víctimas rescatadas fueron puestas a buen recaudo.