Tras cinco días sin agua potable, la población de Talara Baja, en la región de Piura, expresó su disconformidad debido al riesgo que supone el no tener acceso al recurso líquido en medio de la pandemia de la COVID-19. Asimismo, ciudadanos advirtieron que, si la situación continúa de la misma forma, tomarían medidas de fuerza, como el bloqueo de carreteras.
Cabe señalar que la provincia se encuentra en el nivel de alerta alto por aumento de contagios de COVID-19. Además, se reportó en la zona el primer caso de variante ómicron.
Según EPS Grau, entidad que provee de agua a la zona, el servicio retornaría el jueves 6 de enero; sin embargo, hasta el este viernes 7 los ciudadanos continuaban reportando la carencia del recurso. Algunos de los sectores afectados serían las urbanizaciones Fonavi y Aprovicer, así como el parque 4 y el parque 30.
Se consultó a la entidad con respecto al retorno del servicio, pero hasta el cierre de esta nota no se contó con una respuesta.
Por otro lado, pobladores expresaron su descontento tras el anuncio de un nuevo corte para el día sábado, el que duraría una semana. Sin embargo, la EPS Grau informó que este corte, dispuesto por el Proyecto Especial Chira-Piura, cuenta con una medida de contingencia. Por ello se procederá a activar el sistema de captación de emergencia a través del río Chira, el cual facilitará el funcionamiento normal de la Planta de Tratamiento de Agua Potable El Arenal, que abastece a la provincia.
La EPS Grau también informó a los usuarios de la provincia de Paita que, debido a las recientes fallas registradas en la Estación de Bombeo de Agua Potable I, se restringió la distribución del líquido en la parte alta de la ciudad de manera temporal.
La entidad señaló que, a raíz de esta emergencia, se ha producido una disminución del caudal enviado a su respectiva zona de cobertura, por lo cual ya se ha coordinado la intervención del Departamento de Mantenimiento, con el fin de superar esta problemática.