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Sociedad

Minsa alerta que el 85,5 % de fallecidos por coronavirus padecía de obesidad

En tanto, el 43,1 % de muertos con COVID-19 eran diabéticos y el 27,2 %, hipertensos.

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Especialistas indicaron que es muy difícil mejorar los niveles de saturación de oxígeno y ventilar a los pacientes obesos con COVID-19. (Foto: John Reyes / La República)

Según el reporte del Sistema Informático Nacional de Defunciones (Sinadef), del total de pacientes fallecidos como consecuencia de la COVID-19, el 85,5 % padecía de obesidad. Así lo alertó el Ministerio de Salud (Minsa), por lo que hizo un llamado a la población para cambiar de hábitos y tener cuidado en su alimentación.

Los especialistas del equipo de Promoción de la Salud del Minsa explicaron que la obesidad aumenta el riesgo de muerte y complicaciones en enfermos con COVID-19, ya que altera el sistema inmunológico de la persona y disminuye la función pulmonar a través de una mayor resistencia en las vías respiratorias y dificultad para expandir los pulmones.

“Cuando los pacientes con obesidad necesitan ser ingresados en unidades de cuidados intensivos (UCI), es un desafío mejorar sus niveles de saturación de oxígeno y ventilarlos”, señalaron.

Por otro lado, los registros del Sinadef muestran que el 43,1 % de los pacientes fallecidos por COVID-19 presentaban diabetes y el 27.2 % hipertensión, lo que confirma que estas enfermedades crónicas complican más la salud de los infectados con el nuevo coronavirus.

Ante el alto porcentaje de personas con obesidad que murieron por la pandemia, los especialistas consideran que es importante que la propia población sepa identificar en las advertencias publicitarias (octógonos) la cantidad de azúcar, sodio, grasas saturadas y grasas trans de los productos procesados que consumen.

“La población tiene que aprender a reconocer de manera clara y sencilla la cantidad de octógonos que pudieran tener los productos procesados y ultra procesados, y saber elegir de manera responsable qué es lo que están consumiendo”, manifestaron.

Asimismo, creen que la industria involucrada podría cumplir un rol fundamental en la promoción de una alimentación saludable si es que reducen el contenido de los compuestos dañinos para el organismo.

De igual modo, se sugiere que la industria podría poner a disposición más opciones saludables y nutritivas para todos los consumidores, así como limitar la comercialización de productos altos en azúcar, sal y grasas, especialmente a los menores de edad.

El equipo de Promoción de la Salud del Minsa recordó que para mantenernos en buen estado durante la pandemia es vital la alimentación saludable, la actividad física por al menos 30 minutos al día y el manejo de las emociones.

Para la alimentación saludable se sugiere aumentar el consumo de frutas, verduras, legumbres, cereales integrales y frutos secos, además de la ingesta de al menos dos litros de agua por día y la reducción de comida rica en grasas y azúcares.

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