Después de que la Municipalidad Provincial de Chiclayo (MPCh), dispuso el cumplimiento de medidas sanitarias contra la COVID-19 en los mercados que administra, algunos comerciantes no han tenido mejor idea que invadir la vía pública para seguir vendiendo sus productos.
Algunas zonas de la ciudad de Chiclayo se han convertido en mercados improvisados siendo propicios para el contagio. Hoy se realizó un operativo en la intersección de la vía de Evitamiento con la prolongación Bolognesi, donde se encontró una gran cantidad de ambulantes.
En este lugar se constató que los vendedores no contaban con carnet de sanidad, y vendían sus productos de primera necesidad en pésimas condiciones de higiene y salubridad, por lo que se procedió al desalojo y decomiso de la mercadería.
En su defensa, los comerciantes indicaron que no tiene más opción que trabajar en la calle, debido a que muchos se han visto afectados por la suspensión de actividades económico o pérdida de empleos.
“Por favor, queremos trabajar. A nosotros no nos ha tocado ningún bono y no tenemos más opción que trabajar”, expresaron algunos vendedores.
Durante las diligencias, los informales se resistieron al desalojo y se enfrentaron a la Policía, Ejército y Serenazgo. La comuna de Chiclayo informó que se detuvo a uno de ellos, que amenazó con cuchillo en mano a miembros de la policía.
La represión de las autoridades ocasionó que algunos vendedores intentaran agredir a los agentes. Sin embargo, el enfrentamiento no pasó a mayores y pudo ser controlado.
Asimismo, los operativos continuaron en los exteriores de la urbanización José Quiñones, en la urbanización Satélite, y en inmediaciones del condominio Torres de San Gabriel, en la urbanización Remigio Silva.
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