Coronavirus en Perú. El establecimiento penitenciario de Chiclayo cuenta con dos médicos, seis técnicos en enfermería y una licenciada para atender a una población que bordea los 4680 internas e internos bajo los regímenes ordinario, cerrado especial y pabellón de mujeres..
Según informó la Defensoría del Pueblo, hasta el momento, siete internos dieron positivo para la prueba de COVID-19 y un interno presenta sintomatología, pero además el 85% del personal se encuentra con licencia por salud y aislamiento por estar infectados.
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Frente a esta situación, tras recuperar el control del penal, la Defensoría pidió a la Gerencia Regional de Salud (Geresa) realizar un estudio epidemiológico al interior del penal, a fin de evitar la propagación de más casos. Asímismo, requirió que se refuerce la atención de salud en dicho penal para asegurar la atención médica de los reos.
Como se recuerda, en el reclusorio ocurrieron una serie de motines que dejaron dos víctimas mortales y parte de la infraestructura deteriorada. El origen de las revueltas fue la presunta presencia de internos infectados y la presunta falta de medidas de bioseguridad.
Por ese motivo, la institución señaló que urge la atención para los agentes, pero también para los internos.