En Arequipa, un miembro del Ejército Peruano que presta servicio en el cuartel de Zamácola, del distrito de Cerro Colorado, grabó un video para denunciar presuntos abusos y maltrato físico al interior de la base castrense. Indica que se vio obligado a realizar la grabación pues, debido al estado de emergencia, no puede acudir a la Fiscalía o comisaría por estar confinados a la base y a labores de patrullaje en las calles.
El soldado se identifica como el sargento de segunda Renzo Henry Montoya Huaman, quien presta servicio en la compañía comando 113. Su agresor sería el capitán Cesar Gustavo Justo Paz según lo que narra el joven soldado.
De acuerdo al video, sería precisamente el oficial Justo Paz, uno de los responsables de parte de la tropa, quien se habría enzañado con él al punto de golpearlo e insultarlo en reiteradas ocasiones como una forma de castigo a un error cometido. Da una fecha como referencia, el viernes 20 de marzo último. Ese día entre las 5 y 6 de la tarde, iba a desplazarse en un bus al aeropuerto, cuando el capitán Justo lo pateó en el hombro con sus botas además de un fuerte golpe en la nuca. El castigo que recibió fue porque no contó bien a los soldados.
Henry indica que aquel día, el oficial lo insultó y además lo amenazó si se quejaba. “Si quieres llorar, hijo de...”, le habría dicho entre otras palabras soeces. La agresión se dio frente a otros oficiales y soldados de la tropa cuyos nombres también son revelados.
Al día siguiente, Justo Paz -según la denuncia continuó con las amenazas y le indicó al soldado Montoya Huaman que ya lo conocía. Desde ese día el temor ha invadido al sargento. “Ya no puedo dormir en las noches por temor a que me pase algo, no puedo hacer una denuncia formal, los hechos sucedieron desde que empezó la cuarentena”, dijo.
Pero el denunciante no sería la única víctima de estos abusos. En el video indica que otros de sus compañeros también sufrirían de golpes, castigos y abusos por parte del oficial. Nadie denuncia por temor a represalias.
Pero los golpes e insultos no sería lo único irregular. Montoya asegura que les dieron 30 mascarillas y 30 pares de guantes para su uso dado que vigilan que se cumpla el estado de emergencia por la pandemia del coronavirus.
Sin embargo, luego de ello les habrían indicado que devuelvan 10 pares de guantes y mascarillas, mientras que el personal femenino tuvo que devolver 5 de cada implemento. Según indicó el militar de ese modo atentan contra su salud cuando salen a patrullar. Con la voz a poco de quebrarsele, pidió que la Fiscalía tome cartas en el asunto porque teme por su vida.
Conocidas las denuncias del joven sargento, realizadas a través del video, el presidente de la Junta de Fiscales de Arequipa, Franklin Tomy López, anunció que se iniciará una investigación para determinar las responsabilidades de los presuntos abusos cometidos en el Cuartel de Zamácola.