Una disputa entre las autoridades de la Superintendencia Nacional de Salud (Susalud) y del Hospital Hipólito Unanue deja en evidencia la lamentable condición en la que se encuentra el servicio de salud pública.
Tres años después de investigar la muerte de una paciente en el nosocomio ubicado en el distrito de El Agustino en 2015, Susalud concluyó que médicos y técnicos cometieron infracciones muy graves referidas a la seguridad de la paciente, lo que originó su fallecimiento debido a la falta de diligencia en el seguimiento del caso.
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En 2018, Susalud impuso a las autoridades del hospital Unanue una multa de 1 millón 380 mil 300 soles. Dos años después, el monto se elevó a 1 millón 448 mil 766 soles por los intereses generados, ya que los responsables del centro de salud se negaron a pagar la multa.
Ante la persistente renuencia de los responsables del nosocomio nacional, Susalud resolvió tomar otras acciones. El hospital nunca respondió a los requerimientos de cobro. No quiso darse por enterado. Se negaba a asumir las consecuencias por la muerte de una paciente cuya identidad, increíblemente, ni Susalud ni el Hospital Hipólito Unanue quieren revelar.
Así que el 5 de enero de este año, luego de dos años que Susalud trata de cobrar la multa infructuosamente al Hipólito Unanue, el ejecutor coactivo de Susalud procedió a trabar el embargo en forma de retención de los ingresos propios del hospital. Es decir, aquellos ingresos directamente recaudados por consultas que los pacientes efectúan a las cajas del hospital, sin afectar el dinero entregado por el Estado para su funcionamiento.
La aparente ejemplar sanción suponía afectar la atención de 500 pacientes al día que recibe en promedio el hospital Unanue, en su mayoría ciudadanos de escasos ingresos que no les permiten sufragar tratamiento particular. Sin embargo, Susalud continuó con el procedimiento legal correspondiente avalado por las normas vigentes.
Así que intervino la Procuraduría del Ministerio de Salud, que en representación del Hospital Hipólito Unanue, el pasado lunes 17 de febrero presentó una demanda de Revisión Judicial ante la Tercera Sala Especializada en lo Contencioso Administrativo de la Corte Superior de Lima, para que se pronuncie sobre la legalidad del procedimiento de ejecución coactiva de Susalud.
¿Y los familiares de la paciente muerta por negligencia en el hospital de El Agustino?
A estas alturas para las autoridades del Unanue, con el apoyo del Ministerio de Salud, lo que más importaba era que Susalud no se cobrara el 1 millón 448 mil 766 soles por haber dejado morir a la paciente cuya identidad se niega a mencionar (La República lo conseguirá de todos modos).
Presentada la demanda de Revisión Judicial ante el Poder Judicial, las autoridades del hospital Unanue solicitaron a Susalud suspender el cobro de ejecución coactiva hasta el pronunciamiento del Poder Judicial. Y así fue.
En 24 horas Susalud notificó al Hipólito Unanue que su pedido había sido aceptado: se levantaba el embargo y suspendía el procedimiento de ejecución coactiva. Habían conversado. Habían acordado. Habían celebrado un entendimiento. Pero en ninguna parte se menciona ni a la víctima ni a sus familiares.
Según la resolución de Susalud del martes 18 de febrero, la procuraduría recurrió al artículo 23.3 del Texto Único Ordenado de la Ley 26979 de Procedimiento de Ejecución Coactiva (Decreto Supremo 018-2008-JUS) para paralizar el cobro activo. Dicha norma indica que la sola presentación de la demanda de revisión judicial suspende el cobro activo, hasta que emita resolución el Poder Judicial.
Esto es, las autoridades del Hospital Hipólito Unanue, que jamás respondieron a las comunicaciones de cobro de la multa que Susalud le aplicó hace 5 años, han recurrido al Poder Judicial para alargar más el pago o, eventualmente, evitarlo para siempre.
Susalud ratificó a La República que existió responsabilidad de los servidores del hospital Unanue en hechos que derivaron en la muerte de una paciente.
“El caso fue detectado por el área de Protección de Derechos por intermedio de una denuncia pública. Se acogió la denuncia, se investigó, se reunieron todos los medios probatorios y testimonios de los involucrados, y se estimó que se cometieron faltas tipificadas en el reglamento de sanciones e infracciones de Susalud”, explicó el superintendente Carlos Acosta Saal.
“Cuando se abrió el proceso, se comunicó a las partes y las invitó a que presentaran sus descargos. El juez de la primera instancia dictó sanción. La parte sancionada (el hospital) pidió revisión, pero igual se sancionó y se comunicó al hospital para que pague”, relató.
Acosta dio testimonio de la impasividad de las autoridades. Para ellas, Susalud no existía.
“El hospital no respondió nada. La unidad de cobro coactivo ha estado dos años tratando de conseguir que pagara, pero el hospital no generaba ninguna respuesta. Hasta que al fin se logró la ejecución coactiva final (el embargo a la cuenta) y el hospital ha respondido con una medida para la revisión judicial de la sanción. Así nos comunican que tenemos que inmovilizar la cobranza hasta que termine la revisión judicial”, señaló.
El superintendente Carlos Acosta también se refirió a la insólita actuación de la procuraduría pública del Ministerio de Salud que eligió defender a las autoridades del hospital Unanue e inició acciones legales para suspender el cobro coactivo, lo que efectivamente consiguió.
“Nosotros hemos instado a la procuraduría del Ministerio de Salud a que haga su papel. Ellos nos han impugnado (a Susalud) y han salido en defensa de los hospitales. Nosotros somos la contraparte. Han paralizado el pago mientras dure la revisión judicial. Son las puertas que la ley permite. No nos puede gustar, pero es así”, manifestó Acosta.
El director general de Operaciones de Salud del Minsa, Juan Luis Herrera, confirmó que los responsables del Hospital Hipólito Unanue recurrieron a la procuraduría del Ministerio de Salud para impedir el cobro coactivo de la multa por la muerte de una paciente.
“Nuestro compromiso es hacer cumplir lo que Susalud ha sancionado, respetamos que exista el rol regulador de Susalud como la instancia que garantiza el derecho que se tiene como paciente”, argumentó.
“El hospital es una unidad ejecutora y tiene toda la libertad de hacer el procedimiento ante el Poder Judicial porque de acuerdo con su juicio, la acción que tomó Susalud requiere revisión. Hay que tener en cuenta que del año 2015 a la fecha, todos los actores que vieron los procesos administrativos no están, y los que estuvieron en el procedimiento de la muerte de esta señora se han jubilado, y no están en el hospital”, apuntó.
Herrera dijo que las autoridades del Hospital Hipólito Unanue no pretenden sustraerse de la responsabilidad señalada por Susalud, pero que requieren documentarse sobre el caso.
“Hay mucha información que desconocemos nosotros. El hospital no está jugando a doble cachete sino que quiere hacer prevalecer que se han omitido algunos pasos que para ellos son importantes a considerar y Susalud no puede revisar nuevamente el caso porque el plazo ya excedió del tiempo de que el hospital pueda hacer las absoluciones ante esta entidad”, concluyó.
Como decía el viejo poeta, en el Perú la salud necesita cura.
El presidente de la Federación Médica Peruana, Godofredo Talavera Chávez, expresó que su gremio está en contra del embargo de las cuentas del Hospital Hipólito Unanue que logró Susalud con el fin de cobrarse una multa por la muerte de una paciente. Talavera ni siquiera está de acuerdo con que exista Susalud, cuya labor es defender los derechos de los pacientes.
“Soy de la opinión de que no deberia existir Susalud porque en casos de negligencias existen otras instancias, como el Poder Judicial, que es el que individualiza responsabilidades y procede penalmente, cautelando los derechos de los afectados. Se debe revisar la función real de Susalud”, dijo.
Mediante un comunicado, la Federación Médica Peruana (representante de los profesionales que laboran en todos los hospitales del país) anunció que ha solicitado una reunión urgente a la Ministra de Salud para derogar “la ilógica función de Susalud”, de acuerdo con Godofredo Talavera.
Sanción en Hipólito Unanue
- 500 pacientes atiende al día en promedio el Hospital Hipólito Unanue.
- 5 años han transcurrido de la muerte por negligencia de la paciente.
Debido a que las autoridades del Hospital Unanue recurrieron al Poder Judicial, Susalud tuvo que suspender el cobro coactivo de la multa.
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