Para muchos, una buena mañana no puede iniciar sin tomar una taza de café. Americano o expreso, esta bebida bandera ha sabido ganarse un lugar en los desayunos peruanos o como pretexto para iniciar una plática con alguien durante una noche fría.
La diversidad en los tipos de granos que existen en el país, así como el ser una fuente de empleo para más de dos millones de peruanos, propiciaron a que en el 2007 el café normal y orgánico sean incorporados en la lista de nuestros Productos Bandera.
De esta forma, en 2008 el Ministerio de Agricultura declaró como el Día del Café Peruano el cuarto viernes de agosto de cada año, debido al reconocimiento mundial que tiene este cultivo por su alta calidad.
Esta fecha busca resaltar el valor del café peruano, que en abril pasado fue reconocido como el mejor del mundo, al alzarse la Cooperativa Agraria Cafetalera Valle de Incahuasi con la condecoración del primer lugar de los Premios de Café SPP – Símbolo de Pequeños Productores.
A pesar de que el consumo de café produce mucha controversia, muchos estudios resaltan sus beneficios, debido a la alta presencia de compuestos bioactivos, que son los encargados de desempeñar importantes funciones en el cuerpo y en la prevención de algunas enfermedades como las degenerativas.
Pero los efectos positivos de la cafeína están ligados a una cantidad específica que no se debe rebasar. Entre las cantidades recomendadas para su consumo, se sugiere que para adultos sanos debe ser entre 300 y 400 mg al día, siempre acompañado de un estilo de vida saludable.
No se recomienda su consumo en niños y adolescentes. En el caso de las personas embarazadas se establece un máximo de 200 mg al día y a los que tengan problemas cardiovasculares o hipertensión arteral, limitar su consumo.
Asimismo, la dosis sugerida es de tres tazas de café diarios, siendo seis una cantidad excesiva, según un especialista. Su alto consumo puede generar perjuicios como el insomnio, mareo, deshidratación y una futura dependencia.