La Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) es esencial para ayudar a mantener con vida a los habitantes de Gaza, consideró el martes un portavoz de esa organización, que acaba de ser proscripta por el parlamento israelí.
"La UNRWA es irremplazable. Es esencial. Esto es un hecho, independientemente de la legislación aprobada ayer", declaró Jonathan Fowler, portavoz de la agencia en Jerusalen Este, en una entrevista con AFP.
A pesar de la oposición de Estados Unidos y la advertencia del Consejo de Seguridad de la ONU, el Parlamento aprobó por una abrumadora mayoría (92 votos a favor y 10 en contra) prohibir "las actividades de la UNRWA en el territorio israelí", incluyendo Jerusalén Este, un sector anexado por Israel.
Desde hace más de 70 años la UNRWA proporciona ayuda y asistencia esenciales a los refugiados palestinos, pero enfrenta severas críticas por parte de las autoridades israelíes.
La agencia dispone e unos 18.000 empleados entre Cisjordania ocupada y Gaza, de los cuales 13.000 son maestros y 1.500 personal sanitario.
Fowler declaró que la UNRWA espera que la decisión sea revocada.
"Corresponde a la comunidad internacional y a las autoridades israelíes, como miembros de la comunidad internacional, decir cuál es el plan B" si la decisión llegara a aplicarse en tres meses, como anunció el Parlamento, destacó.
A diferencia de otras agencias de la ONU que trabajan con asociados externos -como escuelas u hospitales- para proporcionar servicios que financian y coordinan, la UNRWA emplea a sus propios maestros y personal sanitario.
"Todo el sistema de las Naciones Unidas, así como otros actores internacionales, dependen de las redes logísticas de la UNRWA y de su personal para intentar mantener a la población de Gaza viva. Somos la columna vertebral", destacó Fowler.
Un segundo texto también votado el lunes prohíbe a los funcionarios israelíes trabajar con la UNRWA y sus empleados, lo que debería perturbar considerablemente las actividades de la agencia ya que Israel controla estrictamente todas las entradas de cargamentos humanitarios hacia Gaza.
"Desde el punto de vista de la coordinación esto representa un problema muy grave", enfatizó Fowler.
Al igual que otras agencias la UNRWA depende de los contactos con el ejército israelí o con el organismo del Ministerio de Defensa que gestiona los asuntos civiles en los territorios palestinos, el COGAT, para coordinar la entrada de mercancías a Gaza y la seguridad de los movimientos de su personal.
"En una situación de guerra", como la que se vive en Gaza, "la capacidad de desplazarse y hacer nuestro trabajo con relativa seguridad puede verse gravemente obstaculizada", subrayó Fowler.
El portavoz expresó su preocupación por las consecuencias de esta decisión. "Es un golpe al multilateralismo", dijo, añadiendo que "no es el único lugar en el mundo donde un gobierno podría potencialmente querer deshacerse de una organización de la ONU que considera incómoda".
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