Después del anuncio de su retirada internacional, el atacante francés Antoine Griezmann se centra exclusivamente en su club, el Atlético de Madrid, que recibirá al Lille el miércoles en Champions, y lo hace con un objetivo primordial; levantar al fin la ansiada 'Orejona'.
Por primera vez en su rica carrera, 'Grizou', de 33 años, ha podido disfrutar de un lujo que había estado lejos de su alcance -excluyendo lesiones- durante años: un poco de descanso.
Mientras arreciaban los homenajes, las alabanzas y también algunos interrogantes, tanto el Francia como en España, el campeón del mundo en 2018 pasó la última ventana internacional en su casa, con su familia, antes de una breve estancia en Londres para presenciar un partido de football americano, su otra gran pasión.
Pilar de los 'Bleus' y del sistema de Didier Deschamps desde 2014, hasta ahora Griezmann había antepuesto la selección francesa a todo lo demás, incluyendo lesiones, llegando a encadenar 84 partidos consecutivos Francia entre 2017 y marzo de 2024.
Una entrega incondicional que le ha valido loas, pero también consecuencias para su cuerpo y su mente, con un calendario cada vez más sobrecargado, y que terminó por impactar en su rendimiento el curso pasado.
Como indica el periódico AS, ahora podrá "dosificarse y tomar aire" durante las ventanas internacionales "para que no se repita lo ocurrido en la temporada 23-24, en la que voló durante la primera vuelta y la segunda se le hizo larguísima", a causa sobre todo de una lesión en el tobillo.
El club 'colchonero', del que sigue siendo líder y máximo goleador de su historia, celebra su decisión: "Podrá descansar y estar más fresco, así que es sin duda una buena noticia para nosotros", reconocía para el periódico L'Equipe el presidente del Atlético Enrique Cerezo, quien destacó a "un jugador extraordinario" cuya ausencia dejará "un inmenso vacío" en su selección.
"Antoine dio a Francia y a su selección todo su talento, su fútbol y su liderazgo. Ganó títulos y logró crear un estilo de juego que se ha ido imponiendo progresivamente", explicó su entrenador Diego Simeone el martes, la víspera de recibir al Lille en Liga de Campeones.
"Es un jugador importantísimo para nosotros. No va a tener estos partidos que siempre se suman a una carga importante en sus piernas, esperemos que nosotros podamos seguir disfrutando de todo el potencial que tiene", agregó su entrenador argentino.
"Y aún le quedan buenos años de fútbol por delante", estimó Cerezo, que espera conservar a su N.7, mientras que su contrato expira en junio de 2026.
Luego de un final de la temporada pasada frustrante, Griezmann, que lo ha ganado casi todo con los Bleus, sigue soñando con levantar la Champions con el club de su vida, después de haberse quedado a un paso en 2019 (derrota en penales ante el Real Madrid).
Mirando de reojo hacia el Oeste, donde su sueño americano podría hacerse realidad en Los Angeles Football Club, junto a sus compatriotas Hugo Lloris y Olivier Giroud.