El presidente de la República italiana, Sergio Mattarella, aseguró este sábado que el país “está de luto” por la muerte hoy a los 95 años del papa emérito Benedicto XVI, cuya “dulzura y sabiduría han beneficiado” a “toda la comunidad internacional”.
“Con dedicación siguió sirviendo a la causa de su Iglesia en el cargo sin precedentes de Papa emérito con humildad y serenidad. Su figura permanece inolvidable para el Pueblo italiano”, declaró Mattarella, de 81 años.
Benedicto XVI murió esta mañana a las 9.34 horas locales (8.34 GMT) con 95 años de edad en el monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano, donde residía desde su histórica renuncia en 2013.
El jefe del Estado italiano destacó que Benedicto XVI fue un “intelectual y teólogo, que interpretó con finura las razones del diálogo, la paz y la dignidad de la persona como intereses supremos de las religiones”, antes de añadir: “Recordamos su testimonio y su ejemplo con gratitud”.
También la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, mostró su " dolor” por la muerte del papa emérito, “un gigante de la fe y la razón” y “un gran hombre que la historia no olvidara”, mientras que el ministro de Exteriores, el conservador Antonio Tajani, dijo que fue “gran papa y gran teólogo” del que apreció su modo de explicar la fe.