El gobierno de Ecuador anunció este viernes que extendió a una tercera provincia el estado de emergencia decretado el martes para enfrentar la arremetida del narco, que deja al menos ocho muertos en una veintena de ataques a bala y con explosivos.
Guayas, Esmeraldas y ahora Santo Domingo de los Tsáchilas (oeste) quedaron bajo el estado de excepción que autoriza al gobierno a movilizar militares y restringir derechos por 45 días.
El presidente Guillermo Lasso “decretó ampliar” la medida este viernes para reforzar “las acciones de intervención y garantizar la seguridad ciudadana”, informó la secretaría de Comunicación en una nota de prensa.
Lasso activó la emergencia el martes, a raíz de una ofensiva sin par lanzada por las bandas del narcotráfico en represalia por el traslado de presos en Guayaquil y Esmeraldas (capital homónima), principalmente.
Desde entonces se han producido una veintena de atentados a bala, explosivos y coches bomba contra estaciones policiales, gasolineras y un hospital, así como un amotinamiento de presos que recibió a disparos a la fuerza pública que ingresó al penal Guayas 1 en Guayaquil.
El saldo es de ocho muertos y 23 heridos, la mayoría policías y militares.
En su decreto, Lasso consideró que las medidas dictadas “están siendo efectivas para el restablecimiento del orden y para prevenir la ocurrencia de nuevos atentados” en las provincias de Guayas (cuya capital es Guayaquil) y Esmeraldas.
El jueves, al menos 15 uniformados heridos dejó un nuevo motín carcelario en el puerto de Guayaquil.
Varios analistas consideran que la violencia en las calles tiene relación con la crisis penitenciaria que estalló en 2020 y que ha visto con estupor el asesinato de más de 400 prisioneros en frecuentes enfrentamientos entre bandas de reclusos que se disputan el control de las cárceles.
Al menos 13 atentados perpetrados por bandas de narcos dejaron el martes cinco policías muertos y otros dos heridos en Ecuador. Foto: composición LR / AFP