En una prisión de Florida, Estados Unidos, dos presas intentaron asfixiar a una mujer que resguardaba el lugar. A pesar de no tener herramientas para cometer el ataque, las prisioneras utilizaron la funda de una almohada para perpetrar su delito.
Las imágenes que registró la grabación de la cámara de seguridad dejan ver el momento preciso de la agresión. Una de las reclusas, uniformadas con trajes anaranjados, da el primer movimiento mientras la guardia está de espaldas. De inmediato su compañera la ayuda y se pierden en el campo visual de las cámaras.
Fue cuestión de segundos para que otras reclusas se acercaran a ver qué ocurría. El grupo de mujeres ayudó a la guardia, identificada por las autoridades como Lillian Jiménez. Las agresoras, de nombre Bridgette Harvey y April Colvin, fueron acusadas de intento de asesino en primer grado.
Un reporte del medio The Washington Post indica que una de las reclusas, que salvó a la mujer de seguridad, conversó con la policía y relató que las acusadas habían orquestado su plan un día antes.
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“Una situación desesperada terminó convirtiéndose en el rescate de la oficial”, señaló el jefe de policía del condado de Hillsborough, de Tampa, Chad Chronister.
Además, resaltó la valentía y honestidad de las reclusas que actuaron rápido para salvar al personal de seguridad, a quienes dio las gracias por su actuar.
“Aunque estas presas pusieron a nuestra oficial en peligro, hubo otras que hicieron lo correcto al acudir en su ayuda, por eso estoy agradecido”, sostuvo.