El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, reiteró este viernes su intención de vetar la ley que regula el aborto en caso de violación, aprobada el jueves en la Asamblea Nacional (Parlamento), en cumplimiento de una sentencia de la Corte Constitucional.
“La postura del presidente se va a expresar como manda la Constitución a través del veto. Yo respeto la vida desde la concepción”, manifestó Lasso en contra de los derechos de las gestantes, durante una visita al cantón Montalvo, de la provincia Los Ríos, en el centro del país. Con esta medida, también, se revictimiza a las agraviadas, quienes además de sobrevivir a este tipo de violencia se verían obligadas a continuar con un embarazo no deseado.
El mandatario ecuatoriano ya había adelantado su intención de vetar la norma, en declaraciones al canal Ecuavisa. Esto, a pesar de que los detalles de la ley aún estaban en discusión en la Asamblea y no se conocía la redacción final del texto.
A criterio de Lasso, quien tiene un plazo de 30 días para imponer el veto, la Asamblea se ha extralimitado en el mandato de la Corte Constitucional, por lo que cree necesario revertirla sin tomar en cuenta la decisión que tomen las mujeres sobre sus cuerpos.
La norma aprobada por el Parlamento ecuatoriano permite que las mujeres víctimas de violación, que hayan quedado embarazadas, puedan interrumpir la gestación hasta las 12 semanas, y excepcionalmente hasta las 18 en casos de niñas, adolescentes y mujeres indígenas y del área rural.
La ley obtuvo el respaldo de 75 asambleístas, cinco más de los 70 que eran necesarios para sacar adelante el texto, tras un largo debate entre los parlamentarios ecuatorianos, que dejaron entrever la diversidad de opiniones sobre este asunto.
Este fue el resultado de una segunda votación. En la primera, la medida solo alcanzó 66 votos a favor, por lo que se pidió una reconsideración.
En Ecuador, el aborto terapéutico estaba permitido únicamente en casos en que la vida de la mujer corra peligro o por violación a personas discapacitadas.
Surkuna es una de las organizaciones feministas que ha mantenido su lucha por la despenalización del aborto en el país y que acompaña a niñas, adolescentes y mujeres en su acceso a un aborto.
En su primer informe, presentado luego del fallo de la Corte, señaló que, hasta noviembre del 2021, 22 niñas solicitaron un aborto, 16 pudieron acceder a uno dentro del sistema público. En tanto, las cinco restantes tuvieron problemas por la solicitud de denuncia y la generación de un proceso que las revictimiza.
#@AsambleaEcuador, escucha nuestra lucha. Es por una #LeyJustaYReparadora que no imponga obstáculos para el acceso al derecho al #AbortoPorViolación. Estamos en vigilia permanente, no permitiremos ningún retroceso”, publicaron en sus redes sociales.
Con información de EFE.