Por primera vez desde que se tiene registro, las precipitaciones en la cumbre de Groenlandia, a unos tres kilómetros sobre el nivel del mar, cayeron en forma de lluvia, y no de nieve, el último el 14 de agosto.
Al estar ubicada a 3.216 metros de elevación, con temperaturas bajo cero (casi) todo el tiempo, este punto de la Tierra nunca tiene las condiciones atmosféricas para generar precipitaciones. El fenómeno de la semana pasada ha dejado asombrados a los investigadores en la estación ubicada en ese remoto punto del Polo Norte.
Ese día hubo lluvia “durante varias horas”, según los registros del Centro de Datos Nacional sobre Nieve y Hielo de EE. UU. (NSIDC, por sus siglas en inglés). De acuerdo a Ted Scambos, investigador de este instituto, se trata de una prueba de que Groenlandia se está calentando rápidamente.
“Lo que está ocurriendo no es simplemente una o dos décadas cálidas en un patrón climático cambiante”, dijo Scambos a CNN. “Esto no tiene precedentes”.
Mientras que en el resto del planeta se ha elevado la temperatura en 1°C en promedio, en la región ártica llega casi a los 2°C hasta ahora. “Esta lluvia alarmante en la cumbre de Groenlandia no es un evento aislado”, dijo, por su parte, Twila Moon, una científica del NSIDC.
En julio, el mismo lugar experimentó uno de los deshielos más importantes de la última década, perdiendo más de 8.500 millones de toneladas de masa superficial en un solo día, lo que sería suficiente para sumergir Florida en cinco centímetros de agua.
Este fue el tercer caso de deshielo extremo en la última década, durante la cual el deshielo se ha extendido más hacia el interior que durante toda la era de los satélites, que comenzó en la década de 1970.
En la estación de investigación de la cumbre se observaron gotas en las ventanas, lo cual causó asombro a los científicos y personal que la habitan, recoge la BBC.
Jennifer Mercer, responsable del programa de la Oficina de Programas Polares de la Fundación Nacional de la Ciencia, ha mencionado que la lluvia tendrá un efecto duradero en las propiedades de la nieve, dejando una costra que absorberá más energía del sol, hasta que quede enterrada por la nieve.
Scambos señaló que esta capa de costra será también una barrera que impedirá el descenso del agua de deshielo, que inundará la superficie de la capa de hielo e iniciará la salida de agua en las zonas más altas. “Este cambio duradero será visible en los registros de los núcleos de hielo en el futuro”, dijo a CNN.
Las capas de hielo masivas pueden derretirse rápidamente cuando la temperatura del aire es cálida. La pérdida de masa de la superficie del domingo, según el Centro Nacional de Datos de Nieve y Hielo, fue siete veces más cálida que la media de mediados de agosto.