Los miembros de la realeza británica vestirán de civil en el funeral del príncipe Felipe para evitar mostrar qué príncipes tienen derecho a uniforme militar y evitar la humillación contra Enrique, quien abandonó la monarquía hace un año.
Según información de los medios británicos, el duque de Edimburgo, fallecido el pasado viernes, será enterrado el 17 de abril en el castillo de Windsor, unos 50 km al oeste de Londres, y debido a la pandemia solo podrán asistir al funeral 30 personas, en su mayoría familiares cercanos.
Para esa ocasión, la reina Isabel II decidió que todos asistan vestidos de civil. De lo contrario, el funeral habría enfatizado la pérdida de títulos militares honoríficos de Enrique, nieto de la reina de 36 años y excapitán del ejército británico, tras su estrepitosa salida de la monarquía en 2020.
Enrique, duque de Sussex y sexto en la línea sucesoria, fue despojado de sus títulos militares después de abandonar sus funciones oficiales como miembro de la familia real y mudarse a California con su esposa, la exactriz estadounidense Meghan Markle.
Aunque efectuó dos misiones en Afganistán, sólo se le permite llevar un traje con medallas de servicio.
Otro posible conflicto es el del tercer hijo de la monarca, el príncipe Andrés, expiloto de helicópteros de la Marina Real que participó en la guerra de las Malvinas de 1982.
Andrés, de 61 años, fue apartado de la vida pública tras el escándalo provocado por su amistad con el difunto financiero pederasta estadounidense Jeffrey Epstein. El duque de York debía haber recibido el rango honorífico de almirante por su 60 cumpleaños, pero el nombramiento quedó en suspenso.
Según el diario The Daily Telegraph, los miembros de la familia real mantuvieron “intensas discusiones” preocupados por avergonzar a la familia si Enrique y Andrés —los únicos miembros de la realeza que sirvieron en el frente— no llevaban uniforme y otros sí.
Según este periódico conservador la decisión recayó en última instancia en la reina, quien según The Sun “intervino personalmente” para sugerir la norma de vestir de civil.
La decisión permitirá a la familia real presentar un frente unido, al menos en lo que respecta a la indumentaria, mientras que el funeral tendrá un fuerte elemento militar debido al pasado del príncipe Felipe como comandante de marina.
La participación de Enrique en la ceremonia será su primera aparición pública con la realeza desde que él y Meghan, de 39 años, concedieron una explosiva entrevista televisiva en la que acusaron de racismo a algún miembro no identificado de la familia.