Los residentes de la localidad General Alvear en Mendoza, Argentina, no olvidarán jamás el día en que encontraron una escena macabra que les llenó de indignación. ‘Yuma', una perrita callejera a la que cuidaban y alimentaban, había sido decapitada en el Día Mundial del Perro (21 de julio).
Rubén Eleize Leico es el responsable del horrendo crimen, a quien imputaron por maltrato animal después de que los vecinos realizaran protestas para exigir justicia por la muerte del can, según TN.
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Durante el juicio, la fiscal Ivana Verdún llegó a un acuerdo con el abogado del sujeto. Leico admitió su horrendo crimen, pidió perdón e intentó excusarse diciendo que mató al animal bajo los efectos de las drogas. “Estaba muy drogado”.
Tras esto, la Justicia de Argentina condenó al hombre a 8 meses de prisión, que no serán efectivos porque no tiene antecedentes policiales. Además, el imputado tendrá que seguir un tratamiento por su adicción a las drogas, hacer tareas comunitarias y terminar sus estudios primarios.
El abogado Oscar Mellano de la Asociación Encuentro por la Vida Animal cuestionó la condena que recibió el sujeto. “Es una atrocidad. Según hemos sabido, la mayor parte de esta condena fue en realidad por infringir la cuarentena; y por matar a Yuma le han dado solamente un par de meses. Es una muestra del valor mínimo que les estamos otorgando a una vida”, sostuvo.
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‘Yuma’ fue hallada en medio de un charco de sangre en la casita que los vecinos le habían construido para protegerla de las bajas temperaturas. Tenía las patas y su cabeza mutiladas.