Un exoficial de policía de 44 años de Honolulu, Hawái (Estados Unidos), fue sentenciado este miércoles a pasar cuatro años en prisión tras obligar a una persona sin hogar a lamer un urinario público, advirtiéndole que esa era la única forma de evitar ser arrestado, según reportan medios locales.
El incidente ocurrió en enero de 2018. John Rabago y otro agente policial se presentaron en un baño público tras recibir una queja por la presencia de Samuel Ingall, un indigente que vivía en el lugar, según reporta el canal Fox News de Estados Unidos.
La jueza Leslie Kobayashi, quien emitió el veredicto, señaló que el efectivo amenazó con golpear al hombre y con introducirle el rostro en el urinario si no lo lamía. El oficial pisó las piernas de Ingall para mantenerlo de rodillas hasta que realizara la acción indicada.
“Si lames el urinario, no serás arrestado”, dijo Rabago en aquella ocasión, de acuerdo con el diario Usa Today. La magistrada añadió que el agente le dijo a su compañero que borre todos los mensajes de texto sobre el incidente.
Rabago se declaró culpable el 16 de diciembre último. “Le quitaste su única posesión: su dignidad como ser humano”, afirmó la jueza, quien condenó al ex policía a cuatro años de cárcel. “Hace dos años tomé una decisión de la que no estoy orgulloso. Mis acciones cambiaron el curso de la vida para todos nosotros”, afirmó el sentenciado.
También en Estados Unidos, otro policía fue captado mientras ponía su rodilla sobre el cuello de un detenido, de forma similar a lo ocurrido con George Floyd.