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México: a bordo de una avioneta, sacerdote lanza agua bendita para ‘acabar’ con el coronavirus

El clérigo instó a sus feligreses a salir de sus casas para recibir el sacramento.

larepublica.pe
Desde las alturas se observaba a familias enteras esperando la lluvia de bendiciones. (Foto: Milenio)

Un sacerdote voló en una avioneta tipo Cessna por los cielos de Los Mochis en Sinaloa (México) para esparcir agua bendita sobre la población y en especial a los hospitales públicos que atienden a pacientes infectados con coronavirus, informó Milenio.

Pedro Valle Mosqueda, responsable de la iglesia de Nuestra Señora del Rosario, pidió por la mejora de los pacientes afectados por la COVID-19 y el personal de salud que tiene que hacerle frente a la pandemia.

“Únete en oración, recibe sus bendiciones con agua bendita”, dijo el clérigo e invitó a la ciudadanía a salir de sus casas para recibir el agua consagrada durante el vuelo en la avioneta.

Un sacerdote voló en una avioneta para bendecir a la población y hospitales públicos por la COVID-19. (Foto: Milenio)

“Que bendiga esta agua para que a través de esta agua bendita llegue la consagración también al pueblo de Dios de nuestra ciudad de Los Mochis, el municipio de Ahome, que bendiga a nuestra gente, no solo casas, vidas, corazones, hospitales, personal de salud y todas las autoridades, todo el pueblo de Dios que bendiga con su inmensa bondad, sane a los enfermos, libere a los oprimidos, por el mal y sobre todo porque libere al mundo de la pandemia, desde hoy pedimos la dicha para todos, que esta tierra sea bendita y sea salvada por el Rey de Reyes, Señor de Señores Jesús Eucaristía”, señaló Valle Mosqueda.

El padre Pedro Valle Mosqueda pidió por la mejora de los pacientes con COVID-19 y el personal de salud. (Foto: Milenio)

El creer en Dios y estar seguros que él es quien puede traer la salvación a todos, a través de la fe y la oración, fue el llamado que hizo el párroco en la bendición a los ciudadanos.

Desde las alturas se observaba a familias enteras en las banquetas, patios y techos de sus casas esperando la lluvia de bendiciones, como también a los automovilistas que detenían y estacionaban sus vehículos para ver cómo desde el cielo las avionetas les enviaban la bendición y la esperanza para que esta pandemia de la COVID-19 pronto llegue a su fin.