El nombre de Jeffrey Epstein volvió a la escena pública tras las recientes revelaciones del grupo de hackers Anonymous, que develó una lista con nombres de políticos y famosos supuestamente involucrados con una red de pedofilia manejada por el magnate, así como con el estreno en Netflix del documental ‘Jeffrey Epstein: asquerosamente rico’.
Epstein, un millonario con varias propiedades en distintos países, gustaba de coleccionar obras de arte bastante extravagantes. Una de las más destacadas y de la que se conoció su existencia en 2012 es una en la que aparece Bill Clinton, expresidente de Estados Unidos, con un vestido azul y tacos rojos.
Según The Daily Mail, el cuadro relucía en la mansión de Epstein en Manhattan. El portal recogió poco después de la muerte del magnate en agosto de 2019 las palabras de un testigo anónimo que visitó la residencia en 2012 y que, al verla, aprovechó para tomarle una foto.
La pintura, bautizada como Parsing Bill, es obra de Petrina Ryan-Kleid, una artista australiana, quien afirmó para The New York Post que la realizó como su tesis para obtener una maestría en la Academia de Artes de Nueva York. Ella logró vender el cuadro en una subasta por 1.300 dólares.
El retrato es descrito como una obra “realista de la cultura pop” y la autora suele tocar temas políticos y de celebridades para inspirarse en sus trabajos. Justamente, Ryan-Kleid reveló que el vestido azul es una referencia a Monica Lewinsky, conocida por haber mantenido un affaire con el expresidente entre 1995 y 1996.
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“Era solo una obra de arte tonta de la escuela que se suponía que debía mostrar, pictóricamente, los mensajes que nos bombardean con respecto a estos presidentes”, expresó la artista, y agregó que es una forma de retratar cómo los partidos políticos opositores se refieren y caricaturizan a los presidentes.
Otras fuentes afirman que Jeffrey Epstein poseía esta pintura como un símbolo de la estrecha amistad que tenía con Clinton, quien poco después del arresto del multimillonario, quiso deslindar de cualquier relación con él, pese a que muchos testigos afirman haberlo visto en reuniones privadas en las propiedades del magnate.