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Sanidad de España comienza estudio en 36.000 familias para determinar expansión del coronavirus

La investigación liderada por el Instituto de Salud Carlos III permitirá conocer la cantidad de españoles que ya atravesaron la enfermedad o que la tienen activa al momento del análisis.

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Para este estudio se espera analizar un mínimo de 60.000 individuos. (Foto: Arash Khamooshi / Europa Press)

Desde este lunes 27 de abril, España ha iniciado el estudio para conocer la expansión real del coronavirus. Centros de salud y consejerías de Sanidad han llamado al primer grupo de las 36.000 familias seleccionadas por el Instituto Nacional de Estadística, que serán parte de esta investigación.

Es importante destacar que formar parte del estudio es totalmente voluntario. Un total de 90.000 personas serán invitadas a esta pesquisa en la que se analizará (a los participantes) con dos tipos de pruebas. En la primera, se le realizará a los ciudadanos tests rápidos de anticuerpos, mientras que para la otra se requerirá de una muestra de anticuerpos del suero de la sangre.

Para la indagación se ha tomado en cuenta la representación de grupos de todas las edades, así como el sexo y la localización geográfica. Por cada provincia, el tamaño muestral estará entre un rango de 900 personas, como en los casos de Ceuta y Melilla, a 6.000 en la Comunidad de Madrid.

Los tests serológicos permiten detectar el coronavirus en diferentes fases de contagio. (Foto: El País)

Se espera que para esta investigación llamada Estudio Nacional Epidemiológico de la infección por SAR-CoV2 en España (ENE-COVID) se analice un mínimo de 60.000 individuos, según refirió el Ministerio de Sanidad, con el fin de “estimar el porcentaje de la población española que ha desarrollado anticuerpos frente al nuevo coronavirus”.

El titular de Sanidad, Salvador Illa, ha instado a la población española que, pese a que la participación es voluntaria, colaboren con la investigación, porque “la información obtenida será de enorme relevancia para la toma de decisiones de salud pública en el conjunto del estado”.

Asimismo, la pesquisa tiene como objetivos principales conocer la cantidad de la población que ha tenido la enfermedad y está inmunizada, así como detectar aquellos que se encuentran en fase de actividad.

A hospital employee wearing protection mask and gear shows a swab, a cotton wab for taking mouth specimen, used at a temporary emergency structure set up outside the accident and emergency department, where any new arrivals presenting suspect new coronavirus symptoms will be tested, at the Brescia hospital, Lombardy, on March 13, 2020. (Photo by Miguel MEDINA / AFP)

¿Cómo se desarrollará el estudio?

A los voluntarios se les analizará tres veces mediante dos tipos de pruebas. Es así que habrá una separación de tres semanas entre cada muestra, de modo que se pueda observar si la persona desarrolla anticuerpos, lo que implicaría “la evolución dinámica de la enfermedad”.

El primer test rápido brinda la posibilidad de conocer en solo 10 minutos si es que el individuo ha padecido la COVID-19. Dado que se requiere de un simple pinchazo en un dedo, el análisis se realizará en el domicilio o un centro de salud, con personal sanitario correctamente formado para tal fin.

Esta prueba tiene una sensibilidad por encima del 80 %. No obstante, Sanidad refirió que “para asegurar la fiabilidad de los resultados”, se ha previsto realizar una muestra de suero en cada paciente. Para esto, se extraerá sangre de uno de los brazos. Las muestras pasarán por “una técnica serológica más sofisticada y precisa”.

En las dos primeras semanas, hasta el 10 de mayo, se podrá obtener resultados preliminares. Estos servirán al Gobierno para el desarrollo de las estrategias que regirán el desconfinamiento y progresiva vuelta a la normalidad.

La investigación, que ha sido ideada por el Instituto de Salud Carlos III, detallará también el comportamiento de la transmisión del virus en los propios hogares tras seis semanas de confinamiento.

Todos los miembros de la familia serán analizados con el fin de “diferenciar entre las nuevas infecciones por transmisión comunitaria y las que se puedan estar produciendo dentro de los hogares”.