Una mujer de Italia que contrajo el nuevo coronavirus tuvo que esperar 25 días para tener entre sus brazos a su hija recién nacida. La madre permaneció todo ese tiempo bajo aislamiento en un hospital, el cual lo describe como “los 25 días más difíciles de mi vida”.
Gloria Zara Sigismondi, de 34 años, esperaba a su segunda hija cuando su abuela de 80 años fue hospitalizada tras sentirse mal. La joven madre presentó fiebre, y las pruebas que se le realizaron arrojaron que ella tenía coronavirus. “Era terrible, estaba enferma, no respiraba”, contó la mujer al diario La Repubblica de Italia.
La madre fue trasladada a un hospital en Alba y posteriormente a otro en Cueno, lejos de su familia, a quien no dejó de contactar por videollamadas. Gloria calificó como “insoportable” el hecho de no poder abrazar a su otra hija, quien le enviaba besos a través de la pantalla.
El parto tuvo lugar el 15 de marzo, pero la pequeña Lisa fue enviada a su casa en Dogliani, donde la esperaban su padre y su hermana. La madre, por su parte, permaneció en el hospital por 25 días, luego de los cuales se recuperó por completo.
A su llegada a casa, Gloria finalmente pudo abrazar a su hija Lisa. La noticia fue compartida por el alcalde de la localidad, Ugo Arnulfo.
“Hubo momentos realmente terribles en este período, han sido los 25 días más difíciles de mi vida, porque mi familia no estaba a mi lado. No podía abrazarlos y besarlos. Todo fue desgarrador. Un castigo por un crimen que no sentí que había cometido… todo eso terminó”, dijo Gloria al diario Corriere della Sera.
Italia ha sobrepasado los 156.000 infectados y los 19.000 fallecidos por el nuevo coronavirus.