Brasil comenzará a restringir la entrada de extranjeros en vuelos internacionales como una medida para combatir la propagación del coronavirus (COVID-19), según anunció este jueves el ministro de Justicia, Sergio Moro.
El funcionario señaló que, según la ordenanza 126 autorizada por Jair Bolsonaro, desde este 23 de marzo queda restringida la entrada aérea de extranjeros de países nombrados con altas tasas de infección.
“Razones exclusivamente sanitarias debido al coronavirus (COVID-19). Hay excepciones. Respetuosamente, no es deber de los Estados limitar los vuelos internacionales”, añadió Sergio Moro.
Latam, líder del mercado en Brasil, manifestó también que haría una reducción del 90 % de sus vuelos internacionales y del 40 % de los domésticos, y Azul, la tercera mayor aerolínea del país, anunció una disminución de entre el 20 % y el 25 % de su capacidad en marzo y de entre el 35 % y el 50 % a partir de abril.
El miércoles, el Gobierno de Brasil anunció medidas de ayuda a las aerolíneas, como los plazos mayores para entregarle a los reguladores aéreos del país el valor recaudado por las tarifas de transporte e igualmente ampliar hasta doce meses el reembolso a los pasajeros que tuvieron que cancelar sus vuelos.
Las medidas obedecen a que tanto aerolíneas como los operadores aeroportuarios enfrentan una fuerte caída en la demanda por pasajes aéreos tanto por la cancelación de viajes debido a la expansión del coronavirus (COVID-19) como por las restricciones impuestas en varios países, que cerraron sus fronteras aéreas o impusieron limitaciones.
Brasil confirmó hasta el momento siete muertes por el COVID-19, dos en Río de Janeiro y cinco registradas en Sao Paulo, el estado más poblado y más afectado por la enfermedad, así como 621 infectados en la mayoría de los 27 estados del país.