Luego de que algunos medios de comunicación estadounidenses informaran que el gobierno de Donald Trump se proyecta a acelerar las respuestas de solicitudes de asilo y el retorno de migrantes a México para evitar la propagación del coronavirus, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) negó haber recibido alguna notificación.
A través de un comunicado de prensa, la dependencia liderada por el canciller Marcelo Ebrard, aclaró que la administración mexicana hasta el momento no ha recibido un documento formal de Estados Unidos para evaluar la propuesta.
New York Times difundió la información del gobierno de Estados Unidos. (Foto: Internet)
Además, el encargado de la cancillería mexicana resaltó que, si se materializa el pedido del país norteamericano, los responsables del tema la evaluarán y tomarán la decisión pertinente para salvaguardar la integridad de las personas.
“En caso de que se materialice dicha propuesta, una vez que la recibamos formalmente, el Gobierno de México analizará sus alcances y actuará de manera soberana, en defensa de sus intereses, considerando, entre otros, la salud pública y los derechos humanos”, explicó.
Por otro lado, Ebrard manifestó que se encuentra colaborando con las autoridades internacionales para contrarrestar los impactos negativos generados por el COVID-19 y remarcó que México viene siguiendo los protocolos trazados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
México negó haber recibido el pedido de Estados Unidos para ingresar migrantes a su territorio. (Foto: Internet)
Según la información publicada por el diario New York Times, la administración de Estados Unidos anunciará en las próximas 48 horas el retorno de migrantes al país azteca como medida de prevención para la propagación del coronavirus.
Sobre dicho anuncio, uno de los integrantes de la Asociación de Apoyo a Migrantes ubicada en Ciudad de México, afirmó que continua con sus políticas para la deportación de indocumentados.
“El gobierno de Trump no da tregua a sus políticas antiinmigrante, a pesar de los riesgos para la salud, cierra las fronteras, pero mantiene puertas abiertas a las deportaciones”, declaró Cristhians Lavel.
Por ello, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos pidió al Instituto Nacional de Migración (INM) la implementación de medidas cautelares para proteger el estado de salud y la vida de los migrantes hospedados en los albergues y las estaciones provisionales.