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Terremoto de Shaanxi, el desastre natural más mortal de la historia

El 23 de enero de 1556, una región de China quedó totalmente destruida tras el movimiento telúrico, cuyas dimensiones no están del todo claras pero cuyo impacto cambió al gigante asiático.

larepublica.pe
Terremoto de Shaanxi es el que más muertes causó en China. Foto: Referencial

China es uno de los países con mayor movimiento sísmico del mundo y por ello alberga uno de los desastres naturales más letales de la historia, ocurrido en la comunidad de Shaanxi el 23 de enero de 1556.

Ubicada al noroeste del gigante asiático, esta comunidad fue azotada por el letal fenómeno que acabó con la vida de 830 mil personas.

Según los reportes de esa época, prácticamente la ciudad quedó destruida tras el terremoto calculado en una magnitud de 8 grados en la escala de Richter.

Se estima que un área de 50 metros de ancho quedó en escombros luego de que el desastre se sienta también en regiones aledañas como Shanxi, Henan, Gansu, Hebei, Shandong, Hubei, Hunan, Jiangsu y Anhui.

Mapa que ilustra los lugares en donde se sintió el terremoto que mató 830 mil personas. Foto: Difusión

El temblor ocurrió durante el mandato del Emperador Jiajing de la dinastía Ming, y pese a ser el que más muertes causó, no es el de mayor magnitud registrado por el hombre.

Cabe resaltar que en aquel entonces la población vivía prácticamente en cuevas excavadas en roca blanda, a las que llaman loes.

Estas construcciones fueron sepultadas por la agresividad del movimiento telúrico y pese a que transcurrió medio milenio, en la actualidad aún las personas conviven en ellas.

Cuatrocientos años después, China padeció otro sismo a gran escala, esa vez en Tangshan, al cual catalogan como ‘’el más fuerte de los últimos 100 años’’.

El 28 de julio de 1976 suscitó un terremoto de 7.8 grados en la escala de Richter, y mató al menos a 255 mil personas, según datos oficiales, mientras que para los ciudadanos, la cifra fue mayor, puntualiza W Radio.

Aproximadamente 799 mil personas quedaron heridas por el fenómeno natural y centenares de edificios se desplomaron en cuestión de segundos.