Jarred Christiano Dos-Santos solo deberá cumplir labor comunitaria y asistir a cursos de convivencia luego de atacar a su expareja Sarah Colquhuon en su vivienda de Wrexham, al norte de Gales (Reino Unido).
El hombre golpeó a su novia con tanta crueldad que ella perdió el sentido del gusto y el olfato dejándole roto un hueso de la nariz.
Había regresado ebrio a su casa, y fue cuando ella intentó quitarle una botella de vodka que traía en las manos, cuando él empezó a golpearla delante de su hija.
La cogió del cabello y la empujó contra el piso. Allí la siguió golpeando. Hasta que los vecinos alertaron a la policía debido a los gritos de la desesperada mujer. El agresor fue arrestado a los pocos minutos.
Sin embargo, el Tribunal de Magistrados del Nordeste de Gales lo salvó de ir a prisión, dándole solo una orden comunitaria que deberá cumplir durante dos años.
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Además, deberá asistir a un curso para construir mejores relaciones, y otro donde tratará sus problemas con el alcohol.
El abogado de la víctima, Ceri Ellis-Jones, señaló que su defendida ha quedado con un fuerte dolor y hasta ha perdido el sentido del gusto y el olfato debido a la brutalidad de los golpes que recibió.
Igualmente, Dos-Santos fue declarado culpable por los delitos de asalto y fraude. Durante el juicio, el jurado escuchó que el agresor se había vuelto dependiente al alcohol luego de haber perdido a su primera esposa. También fue diagnosticado con trastorno de bipolaridad.