A través de la red social de Twitter, el ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Javad Zarif, también se pronunció ante los ataques, con tres misiles, contras tropas de Estados Unidos en las bases de Ain Alsada y Erbi en Irak.
“Irán adoptó y ejecutó medidas proporcionales en defensa propia, en virtud del Artículo 51 de la Carta de la ONU, al atacar la base desde la cual se lanzó una cobarde arremetida armado contra nuestros ciudadanos y altos funcionarios”, escribió Zarif en su cuenta de Twitter.
Asimismo, el canciller iraní destacó que Teherán “no busca una escalada o guerra”, pero, aseguró, “se defenderá de cualquier agresión”.
Irán lanzó en la madrugada del miércoles pesados ataques con misiles contra dos bases militares en Irak utilizadas por tropas estadounidenses, en una respuesta al asesinato del general iraní Qasem Soleimani por un dron de Estados Unidos.
Los ataques fueron asumidos por la televisión estatal iraní y los Guardianes de la Revolución, que además amenazaron con golpear también a Israel y a los gobiernos aliados de Washington.
De su lado, el Pentágono informó que aún "trabajaba en el balance inicial de daños". Por el momento se desconocen informaciones sobre víctimas a raíz de los ataques.
De acuerdo con el Pentágono, las bases atacadas se encontraban "en alerta debido a las indicaciones de que el gobierno de Irán planeaba golpear nuestras fuerzas e intereses en la región".
La televisión estatal iraní mencionó que se utilizaron "decenas de misiles" contra los objetivos en territorio iraquí, aunque en Washington el Pentágono mencionó que "más de una docena" de proyectiles habían sido lanzados contra las bases aéreas de Ain al Asad y Erbil.
Al asumir la responsabilidad por los ataques, el gobierno iraní advirtió sobre “más respuestas devastadoras” caso Estados Unidos decida un contragolpe.
En una nota, los Guardianes de la Revolución de Irán también llamaron a los estadounidenses a llamar de retorno a sus tropas en Irak y en toda la región.
Por su parte, la Casa Blanca se limitó a informar que el presidente Donald Trump se encontraba “monitoreando de cerca la situación y consultando con su equipo de seguridad nacional”.
El pasado viernes un ataque de un dron estadounidense mató en Bagdad al influyente Soleimani, así como al jefe militar iraquí Abu Mahdi al-Muhandis, alto dirigente de la milicia proiraní Hashed al Shaabi.