Descuido fatal. Las enfermeras de la unidad de cuidados intensivos de un hospital de Brasil pasaron el susto de su vida al ser testigos del preciso instante en que un bebé de tres meses de vida cayó de la incubadora en el que se encontraba internada y sobrevivió de milagro.
Las cámaras de seguridad del Hospital Infantil de Belém – ubicado al norte del país- registró el momento en que una pequeña logró empujar las puertas de la incubadora y se cayó al suelo, sufriendo una severa fractura de cráneo.
A parecer las enfermeras a cargo del cuidado de Roberta Machado se olvidaron de asegurar uno de los laterales de la máquina destinada a crear un ambiente con la humedad y temperatura adecuados para el crecimiento o reproducción de los bebés. Ese terrible descuido fue lo que provocó el accidente.
La madre inmediatamente fue al rescate de su pequeña, quien ofuscada les recriminó a las enfermeras por su estado de salud. Según los especialistas, la recién nacida permaneció dos meses en dicha unidad tras llegar al mundo de forma prematura.
Tras el fuerte impacto, la bebé sufrió fracturas en la clavícula y el cráneo, aunque no necesitó ser intervenida quirúrgicamente. Sin embargo, la pequeña fue sometida a diversas pruebas para evaluar los daños que le causó la caída.
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El incidente ocurrió en mayo de este año, pero las imágenes fueron recientemente entregadas a la policía por autoridades del hospital para colaborar con la investigación judicial que iniciaron los padres de Machado. Actualmente, la pequeña se encuentra en perfectas condiciones y ha sanado satisfactoriamente.