El libro escrito por Álex Brocca, el difunto compañero de Ernesto Pimentel, expone detalles íntimos de su relación y los obstáculos que tuvieron que superar. La divulgación de fragmentos de 'Canto de dolor' en el programa de televisión ‘Amor y fuego’ ha suscitado un extenso debate en el mundo de la farándula peruana.
El reconocido bailarín y coreógrafo Álex Brocca conoció a Ernesto Pimentel en los años 90 durante un evento de televisión. La conexión fue instantánea y pronto se convirtieron en una pareja influyente en el circuito de la farándula. Su relación no solo era romántica, sino también creativa, y colaboraron en varios proyectos que fortalecieron su vínculo.
"La ternura con que se me acercó para conquistarme, me llevó a amarlo sin darme cuenta. Con él todo parecía distinto, a pesar de que desde el principio se atrevió a decirme que solo quería que fuésemos amantes", se lee en el libro.
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En su libro, Álex Brocca describe su relación con Ernesto Pimentel como intensa y llena de altibajos emocionales. Revela cómo su amor mutuo les ayudó a enfrentar diversos desafíos, incluyendo la lucha de Álex contra el VIH. Brocca destaca la importancia del apoyo de Pimentel durante los momentos más difíciles, subrayando el carácter compasivo y solidario de Ernesto. Sin embargo, también menciona periodos de conflicto y malentendidos que pusieron a prueba su unión.
"Me acostumbré a esa convivencia con sus defectos y manías, ya lo amaba y podía superarlo todo. Aunque él moría por vivir y respirar como mujer, era un desastre en cuestiones domésticas. Eras extremadamente desordenado, yo veía hasta por su higiene, lo bañaba, lo cambiaba y me encargaba de su comida. Vuelta vinieron nuestras broncas y hasta aparecieron celos de otro tipo. Me volví un poco rabioso y por querer que Hernán cambiara me acostumbré a golpearlo", continúa Brocca en su relato.
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Brocca falleció en 2004, después de una prolongada batalla contra el VIH-Sida, una lucha que enfrentó con el apoyo constante de Ernesto Pimentel. El libro detalla los últimos días de Álex, enfatizando la dedicación de Ernesto en cuidar de él y la profundidad de su relación hasta el final. La honestidad y valentía con la que Brocca compartió su experiencia con el VIH ha sido fuente de inspiración para muchas personas en la comunidad.
"En una semana había perdido casi tres kilos, empecé a sentir cierto agotamiento, y frente al espejo vi desaparecer esa musculosidad de la que me sentía orgulloso (…). Me dieron la nefasta noticia. 'Sus dos últimas pruebas de tamizaje para ver una posible infección viral salieron reactivas (o positivas, que es lo mismo), lo que significaría que posiblemente esté infectado con el virus del Sida'", narró.
Verónica y Jésica, hermanas de Alex Brocca, expresaron su molestia contra Ernesto Pimentel a días de estrenarse su película biográfica 'Chabuca'. "Ellos saben lo que se había tapado en su momento, del por qué se desplomó", dijo una de ellas en referencia a una escena de este filme.
Luego, las hermanas de Brocca se mostraron en desacuerdo con Ernesto, quien destacó que no solo hay que destacar el pedir perdón a las personas, sino también perdonarse a uno mismo por los errores del pasado.
"No sé de qué perdón puede estar hablando. Mi hermano no pudo decirle textualmente: 'perdóname', porque él no hablaba", sostuvieron ambas.
Asimismo, hablaron sobre unos supuestos celos de su hermano hacia Pimentel: "¿Cómo mi hermano le va a tener envidia si mi hermano le ayudó a hacerse sus primeras polleras con la ropa de mi madre?...Hablo del enojo de la decisión de que denigren mucho a mi hermano".