La actriz peruana Anahí de Cárdenas ha compartido en sus redes sociales los hitos más significativos de su vida, incluyendo su batalla contra el cáncer, su primer embarazo y el nacimiento de su hijo Emile, así como sus vivencias como madre primeriza. A pesar de su anhelo por disfrutar de la maternidad, la artista sorprendió a muchos al revelar que la experiencia no ha sido completamente positiva, especialmente debido a las complicaciones que enfrentó durante el parto.
El último viernes 11 de julio, Anahí de Cárdenas contó las dificultades que ha vivido en los últimos días, debido a que no pudo dar parto normal, como lo tenía planificado, y tuvo que ser cesareada de emergencia. Aunque expresó que no estaba lista para contar lo que realmente le estaba pasando porque se sentía expuesta, la artista terminó por revelar que ha tenido que acudir a una psiquiatra porque siente que tiene depresión postparto.
La actriz de 42 años se animó a contar los desafíos que vive en la maternidad para poder ayudar a otras personas que puedan estar pasando por la misma situación. “No estamos solas”, expresó. Acto seguido, Anahí indicó que quedó en shock porque no estaba preparada para la cesárea, por eso no tuvo un momento mágico cuando le entregaron a su bebé. “Te dicen ‘Ay, lo vas a ver y va a ser amor a primera vista’. En realidad, no fue así. Fue bien duro. Fue lo más brutal que me sucedió”, dijo.
No todo quedó allí. Si bien ella no quería romantizar la maternidad, tampoco se imaginó que iba a ser dura la experiencia al no poder atender a su bebé como quería. “Yo estaba con muchísimo dolor; sin embargo, quería poder hacerme cargo del bebé y no podía. Veía cómo mi esposo lo cambiaba o le daba de comer y sentía tanta culpa de sentirme tan mal por no poder ocuparme de mi hijo”, añadió en su testimonio.
Por otro lado, la actriz de cine, teatro y televisión aseguró que le dio el famoso ‘baby blues’ (un estado emocional que afecta a muchas mujeres después del parto). “Me empecé a sentir como metida debajo del agua, sin la capacidad de poder moverme con la rapidez que normalmente me muevo, de hablar con la fluidez que normalmente hablo y no logro atar pie con bola”, detalló.
Al darse cuenta de sus síntomas, Anahí de Cárdenas decidió acudir a una especialista para trabajar en su depresión postparto. “Tenía un miedo de que le pase algo al bebé, de darle mal la fórmula, de agarrarlo mal, de cambiarle mal el pañal, de moverle el ombliguito y de 1000 cosas (...) me estoy haciendo cargo de lo que siento. Ya empecé a medicarme y la verdad es que hay un antes y un después. Estoy muy agradecida de sentirme un 20% mejor de lo que me sentía”, concluyó.