En noviembre próximo vence el plazo para que el Congreso de la República presente el proyecto de ley para la reforma integral de pensiones, cuya elaboración está a cargo de una comisión presidida por la congresista Carmen Omonte. Hablamos con la parlamentaria sobre los avances.
Desde junio sesiona la Comisión Multipartidaria para la Reforma de Pensiones. ¿Cuáles son los avances?
Además de nuestras sesiones ordinarias, hemos realizado tres audiencias públicas para recoger las propuestas de líderes juveniles, académicos, congresistas, así como de las centrales de trabajadores, pensionistas, representantes del Ejecutivo, los reguladores como la Superintendencia de Banca y Seguros (SBS), el Banco Central de Reserva, las AFP, ONP, y organismos multilaterales como la OIT y la OCDE. Ahora entramos a la fase técnica de evaluación de las propuestas y de un filtro financiero, político y social, y luego se iniciarán los consensos. Pero seguiremos con los foros sobre informalidad y sobre la necesidad de que en los colegios se imparta conocimientos respecto al futuro de sus pensiones.
PUEDES VER Trujillo: Policía intervino a alcalde de Moche cuando daba discurso en plena pandemia [VIDEO]
Pero a la par, el Congreso aprobó leyes que descapitalizan el actual sistema. Está a punto de aprobar la devolución total de aportes en la AFP. ¿Si se destruye el actual sistema, qué se reformará?
El sistema actual, y en ello coinciden todos los que han participado, ha fracasado, no es viable, por eso plantearemos un nuevo sistema previsional. Se está trabajando para las próximas décadas. Nos enfrentamos a una realidad compleja, porque a la crisis que ya tenía el sistema se suma la crisis producto de la pandemia. La comisión deberá sortear estas dificultades. La reforma va de todas maneras, tenemos que tener la capacidad de construirla incluso sobre escombros.
¿Y en qué se orienta el nuevo sistema previsional según las propuestas recogidas?
Se orienta hacia un sistema integrado por cuatro pilares: el pilar 0, es decir, una pensiónbásica para todo ciudadano, condicionada a algún requisito como la residencia, entre otros. Un pilar 1: de contribución obligatoria, y con garantía del Estado para los que tienen mínimos aportes, o que tenga algún aporte del empleador. Un pilar 2: es decir, cuentas de capitalización individuales o colectivas obligatorias, que logren el incremento de la pensión de acuerdo a la densidad de su cotización. Y un pilar 3: basado en aportes voluntarios.
¿Quién administraría los fondos en el nuevo sistema?
Existen planteamientos para que sea pública con gestores de fondos que aprovechen la tecnología y economías de escala. Otra es la administración privada o combinadas. También se evalúa que el cobro de aportes lo realice la Sunat. Mientras que la regulación y supervisión lo realizaría la SBS, pero con nuevas herramientas.
En noviembre deben presentar el proyecto de ley de reforma. ¿Se aprobaría este año?
Confiamos en obtener el consenso político y social desde el trabajo de la comisión que permita que el proyecto de reforma -que apunta a que el 70% de la economía informal tenga una pensión- sea debatido en el corto plazo en el Pleno y la población puede tener este año encaminada su nueva ley de reforma de pensiones.
Suscríbete aquí al boletín de Economía LR y recibe en tu correo electrónico, de lunes a viernes, las noticias más relevantes del sector y los temas que marcarán la agenda.