La icónica sanguchería de Lima con 60 años que casi desaparece en pandemia, pero logró salvarse: la historia de El Chinito
Con la llegada de la pandemia, El Chinito, una sanguchería tradicional de Lima, tuvo que adaptarse rápidamente a nuevas estrategias para garantizar su supervivencia. Conoce la historia de El Chinito
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Con más de seis décadas de historia, El Chinito es una de las sangucherías más concurridas de Lima, conocida por su sándwich de chicharrón. Sin embargo, la crisis sanitaria del 2020 representó una amenaza inminente para su supervivencia. El cierre forzoso durante la cuarentena puso a este emblemático local al borde de la extinción. A pesar de la incertidumbre, la familia Yong, al mando de este negocio familiar, tomó decisiones clave para sortear la crisis y lograr la recuperación.
La estrategia para sobrevivir no fue sencilla. Adaptarse a un entorno completamente nuevo y digital fue fundamental. De un negocio presencial a uno que aprovechó las plataformas digitales, El Chinito no solo mantuvo su base de clientes, sino que consiguió atraer a nuevos consumidores. Este proceso de transformación permitió que la sanguchería se reinventara y hoy siga siendo un referente en la gastronomía peruana.
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Sanguchería de Lima: la historia de El Chinito
Desde su fundación en los años 60 por Félix Yong en el Centro de Lima, El Chinito ha sido sinónimo de tradición y sabor en cada uno de sus sándwiches. El local, conocido por su popular sándwich de chicharrón, fue durante años el punto de encuentro de trabajadores y artistas, quienes acudían a la pequeña tienda por su deliciosa propuesta gastronómica.

Félix Wong fue el fundador de la sanguchería El Chinito. Foto: Facebook / El Chinito Sanguchería
Sin embargo, el impacto de la pandemia afectó profundamente al negocio. Durante el cierre obligado de cuatro meses, El Chinito perdió su fuente principal de ingresos, y la incertidumbre se apoderó de los dueños, quienes vieron cómo el flujo de clientes se evaporaba por completo. El futuro del negocio parecía incierto, pero el compromiso de la familia Yong con la tradición y la calidad gastronómica los impulsó a buscar soluciones.
Estrategias de adaptación: el salto al delivery
Con el cierre del local durante cuatro meses, El Chinito se enfrentó al desafío de adaptarse a la era digital. La solución llegó con la implementación de un sistema propio de delivery, lo que permitió ofrecer sus productos a domicilio sin depender de terceros. Además, se aliaron con plataformas de pedidos en línea, lo que amplió su alcance y permitió llegar a más clientes en distintos distritos de Lima.
El salto a las plataformas digitales no fue fácil. La inversión en tecnología y la capacitación del personal fueron esenciales para garantizar que la calidad de los productos no se viera afectada en el proceso de entrega. La aceptación de los clientes fue inmediata, y las ventas comenzaron a repuntar. El marketing en redes sociales, con promociones atractivas y contenidos visuales, permitió fortalecer la relación con los clientes y mantener la presencia de la marca en un momento tan crítico.
Innovación en el menú: la sanguchería que conquistó a Lima
Si bien el chicharrón sigue siendo el plato estrella, la pandemia obligó a la sanguchería a diversificar su menú. Los dueños decidieron incorporar nuevas opciones para satisfacer a diferentes tipos de consumidores. El ‘chaufarroncito’, una mezcla de arroz chaufa con chicharrón crocante, rápidamente se convirtió en uno de los favoritos de los clientes.

El Chinito cuenta con locales en los distritos de Surco, Miraflores, Barranco Lince, Los Olivos y el centro de Lima. Foto: composición Facebook / Sanguchería El Chinito
Además, se incluyeron alternativas más saludables y ligeras, como sándwiches con pollo a la brasa y opciones vegetarianas, algo impensable en los primeros años del negocio. La creación de menús más accesibles y en tamaños más pequeños permitió atraer a un público más joven, que busca opciones rápidas pero económicas. Esta innovación fue clave para no solo mantener a los clientes fieles, sino también para atraer a nuevos consumidores que ahora tienen opciones variadas y modernas dentro de un local tradicional.
El Chinito: Un Negocio que Sigue Creciendo
Hoy, El Chinito ha logrado superar las adversidades de la pandemia y continúa siendo un ícono de la gastronomía limeña. La empresa ha expandido su presencia en distintos distritos de la capital y no descarta continuar con su crecimiento fuera de Lima. Además, la pandemia dejó importantes lecciones en cuanto a la importancia de la digitalización y la flexibilidad ante situaciones adversas.
La innovación y la adaptación a los cambios han sido claves en la consolidación del negocio. La implementación de sistemas de fidelización, promociones exclusivas en redes sociales y la mejora continua de la experiencia de compra en línea aseguran que El Chinito siga siendo una marca fuerte en el mercado. Con una nueva perspectiva, la sanguchería continúa evolucionando, siempre fiel a sus raíces pero con la capacidad de adaptarse a los nuevos tiempos.























