¿Los fumadores podrían presentar mayores signos de cansancio?
En Perú, el 12,5% de muertes son atribuidas a las enfermedades que derivan del tabaquismo. Ante este escenario, es importante reconocer qué efectos puede causar en los consumidores de cigarrillos, así como en las personas de su entorno.
Con información de Antonio Bernabé-Ortiz, médico especialista en salud pública (*)
El tabaquismo tiene diversos efectos negativos para la salud, entre ellos el cansancio, que también se relaciona con la falta de sueño, el estrés, la ausencia de actividad física y tener una enfermedad, de acuerdo con la Sociedad Americana contra el Cáncer.
El hábito de fumar genera un desgaste importante en el organismo, lo que tiene consecuencias en nuestra capacidad para realizar actividades cotidianas, según explica el médico especialista en salud pública Antonio Bernabé-Ortiz, de la Universidad Científica del Sur (Ucsur).
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“El aparato respiratorio y el aparato cardiovascular están unidos, y se perjudican con el consumo crónico de tabaco. Por lo tanto, la actividad física puede verse reducida junto con la capacidad pulmonar, lo que te hace menos tolerante al ejercicio”, detalla.
De esta forma, los individuos que suelen fumar constantemente se cansan más rápido en comparación con una que no tiene este hábito. “Las personas que fuman en forma crónica tienen menor tolerancia al ejercicio. Mientras que los no fumadores pueden cansarse por correr cierta distancia, los fumadores se cansan con mayor rapidez”, añade el investigador de la Ucsur.
fumadores y cansancio
Además, el científico advierte que existe una relación entre el cansancio derivado del tabaquismo y la ansiedad. “Es común el consumo de comida en periodos de estrés o ansiedad para disminuirla. En el caso de los fumadores, esto se compensa fumando. Pero es un círculo vicioso porque fumas para no estar ansioso y te pones ansioso cuando no fumas. Esto termina causando mayor estrés y cansancio”, señala.
La adicción al consumo de tabaco, conocida también como tabaquismo, representa actualmente una epidemia a nivel global, según entidades como la Organización Mundial de la Salud (OMS). Bernabé-Ortiz explica que esto se debe a la nicotina, componente clave de los cigarrillos que genera dependencia.
Tendencias en el tabaquismo en Perú
Actualmente, el consumo de tabaco causa 8 millones de muertes cada año a nivel mundial, de acuerdo con la OMS. En Perú, el 12,5% de muertes son atribuidas a las enfermedades que derivan del tabaquismo, según el Instituto de Efectividad Clínica y Sanitaria (IECS). Por ello, el Minsa considera que se trata de un problema de salud pública que no solo afecta a los fumadores, sino también a quienes comparten el mismo entorno.
Bernabé-Ortiz aclara que existen dos tipos de tabaquismo: el activo y el pasivo. “El tabaquismo activo comprende a las personas que consumen directamente un cigarrillo o cualquiera de los productos derivados del tabaco”, explica el doctor en epidemiología.
Por otro lado, el tabaquismo pasivo comprende a quienes no fuman, pero reciben el contenido del humo porque están en contacto con fumadores activos al compartir el mismo espacio. Un estudio publicado en la Revista Peruana de Medicina Experimental y Salud Pública indica que los adolescentes se han visto afectados en los últimos años debido a esta situación.
¿Los fumadores podrían presentar mayores signos de cansancio?
“A largo plazo, los niños y adolescentes son los más perjudicados porque, al estar expuestos, el riesgo indirecto por fumar pasa a ser un riesgo directo. Se los expone a comenzar a fumar a más temprana edad, lo cual también tiene impacto en otros aspectos de salud”, advierte el científico, quien es coautor de la investigación.
Consecuencias a largo plazo
Los efectos de los agentes tóxicos del cigarro desencadenan enfermedades a nivel general en las personas fumadoras. “El impacto que causa este consumo directo es global e implica el aumento del riesgo cardiovascular, hipertensión y diabetes”, señala el científico.
“El tabaco tiene un componente anorexigénico, lo que significa que reduce el apetito. Los fumadores crónicos generalmente son delgados, pero no por eso necesariamente más saludables”, advierte el investigador.
El científico además precisa que los perjuicios por fumar no se expresan al poco tiempo de iniciar el consumo: se trata de un daño acumulativo que se suele expresar a futuro y no de la misma forma en todos los casos.
Los niños tienen más probabilidades de desarrollar asma si su padre estuvo expuesto al humo de cigarro cuando era infante. Foto: AFP
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“Se suele escuchar de casos de personas que fumaron toda la vida y nunca tuvieron cáncer. Probablemente no, pero pueden haber tenido otros diagnósticos como enfermedad pulmonar obstructiva crónica, problemas de restricción respiratoria, cicatrices pulmonares o cualquier otra consecuencia, como infarto de miocardio, que está asociado al consumo de tabaco”, explica Bernabé-Ortiz.
Políticas actuales sobre tabaquismo
La Ley 29517, promulgada en 2011, además de prohibir el consumo de tabaco en lugares públicos, es más restrictiva que la normativa anterior, incluyendo frases de advertencia e imágenes alusivas al daño de la salud y fumar en lugares cerrados, pero esto último no siempre se cumple.
“Es fácilmente flexible porque depende de la gente que está alrededor. Si alguien se queja, puede ser que funcione, pero lo que sucede es que la gente se acostumbra a no decir nada. Se necesitan sistemas de vigilancia para el cumplimiento de esta ley”, plantea Bernabé-Ortiz.
“Necesitamos hacer estudios de vigilancia en forma periódica, por lo menos cada cinco años, sobre la situación del tabaquismo para saber si es necesario realizar ajustes en las políticas actuales. Se tienen que reevaluar los indicadores y considerar problemas como el tabaquismo pasivo y el nivel de afección que existe. Aún se tienen que considerar esos aspectos en las encuestas nacionales que se realizan”, finaliza.
(*) Antonio Bernabé-Ortiz es médico graduado de la Universidad Peruana Cayetano Heredia. Cuenta con una maestría en Salud Pública (con énfasis en Epidemiología y Bioestadística) en la Universidad de Washington (Seattle, WA, US) y un doctorado en London School of Hygiene and Tropical Medicine (LSHTM, Reino Unido). Actualmente, se desempeña como investigador asociado y subdirector en CRONICAS, Centro de Excelencia en Enfermedades Crónicas de la Universidad Peruana Cayetano Heredia. Es investigador y docente en la Universidad Científica del Sur. Ha desarrollado diversos estudios en su campo y cuenta con más de 15 años de experiencia.
*Con información de Científica Divulga