Sociedad

Mesa Redonda: incendio de grandes proporciones 20 años después de la última tragedia

El siniestro se registró en el cruce de Puno y Andahuaylas un día después de la conmemoración de los 20 años de la tragedia que dejó más de 400 fallecidos.

El incendio se produjo en la Galería Plaza Central. Foto: URPI-LR
El incendio se produjo en la Galería Plaza Central. Foto: URPI-LR

A 20 años de la última gran tragedia que dejó más de 400 fallecidos, Mesa Redonda volvió a vivir una noche consumida en el fuego. Una de sus galerías se prendió luego de que presuntamente una vela de papel se posara sobre un almacén de plástico.

El incendio de código 3 inició a las 8.00 p. m. en el cruce de los jirones Puno con Andahuaylas, a donde llegaron una ambulancia, cisternas, escaleras telescópicas y unidades de bomberos.

Con más de 11 horas encima, los hombres de rojo lograron controlarlo, aunque se reavivó en dos puntos del local la mañana siguiente. Si bien no ha habido víctimas mortales ni heridos, la escena conlleva a cuestionarse sobre el rol de la Municipalidad de Lima.

Incendio habría sido iniciado por un globo de papel

De acuerdo con los bomberos, el fuego habría iniciado por un globo de papel, el cual tiene un armazón de madera y una vela en su interior. Este presuntamente cayó en la azotea de la galería Plaza Central, donde se encuentra un almacén ilegal de plástico.

El incendio se extendió a la galería Inmaculada Concepción, donde también se guardan plásticos y utensilios de cocina.

El ministro del Interior, Avelino Guillén, llegó en horas de la noche de ocurrido el siniestro para supervisar la situación. Ante ello, reiteró que el lugar contenía juguetes de plástico y era una edificación de tres pisos.

Incendio Mesa Redonda

Incendio Mesa Redonda

Una galería con orden de demolición e ilegal

Tras varias horas de ausencia, el alcalde de Lima, Jorge Muñoz, habló con la prensa. Aunque su mensaje no fue claro sobre el tema de fiscalización, reconoció que el edificio tenía amonestaciones desde hace meses atrás, pero que los dueños hicieron caso omiso.

“Esta galería tenía una licencia de comercialización, más no de depósito. Ya en febrero del año pasado han tenido algunas amonestaciones, pero han seguido funcionando clandestinamente. No estaba autorizada en hacer este tipo de construcciones”, expresó a la prensa.

Muñoz anunció que la galería será clausurada. Mientras tanto, Zuleyka Prado, gerenta de Fiscalización y Control de de la Municipalidad de Lima, informó que el edificio tenía orden de demolición y en febrero de este año lo notificaron. Es decir, cerca de un año después continuó operando.

Mesa Redonda se reavivó el fuego en la galería Plaza Central. Foto: Carlos Félix / La República

Mesa Redonda se reavivó el fuego en la galería Plaza Central. Foto: Carlos Félix / La República

Piden investigación contra el alcalde de Lima

La ilegalidad estaba frente a sus ojos. Pese a que ya se había notificado y se tenía conocimiento sobre el edificio, la Municipalidad de Lima no ha sabido responder sobre esta situación ante las preguntas de la prensa.

De acuerdo con Exitosa, un documento reveló que dueños de galería incendiada en Mesa Redonda se comprometieron en 2017 a desmontar la construcción que funcionaba como almacén clandestino, pero no hubo fiscalización desde entonces.

Tras cuestionarlo, Jorge Muñoz aludió que le faltaron el respeto sin sustento alguno. “Esa es una pregunta que no es pertinente”, refirió.

Cabe precisar que el ministro Avelino Guillén ya había recalcado que estas edificaciones ilegales deberían ser fiscalizadas por la Municipalidad de Lima. “No corresponde a la Policía ni a la Compañía de Bomberos”, precisó.

Es así que Jorge Valdez, regidor de la comuna, pidió que la Fiscalía iniciara una investigación contra Muñoz. “Lo que yo espero es que el resto del Concejo Metropolitano apoye la posibilidad de poder fiscalizar y pedir una sanción para los funcionarios que hayan cometido omisión de funciones”, agregó.

Ciudadanos perjudicados: desesperación y contaminación

Afectados por la falta de responsabilidad en la fiscalización, unos comerciantes se abrieron paso entre el fuego para rescatar lo poco que el siniestro no había logrado consumir. En su necesidad, arriesgaron su vida para no perder el trabajo.

Las imágenes difundidas por redes sociales mostraron la desesperación de los trabajadores, quienes corrían y gritaban por sus materiales pese al fuego.

El daño no culminó ahí, ya que se extendió también a distritos aledaños, donde se percibió una gran contaminación.

El Senamhi advirtió que Rímac, La Victoria, El Agustino y San Juan de Lurigancho han sido perjudicados con los remanentes contaminantes producidos en el siniestro.