Sociedad

Carlos Neuhaus: “Yo creo que sí, que la distribución de la vacuna debe ser gratuita”

Entrevista al vocero del Comando Vacuna. Fue presidente del Comité Organizador de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Lima 2019.

El vocero del denominado Comando Vacuna, Carlos Neuhaus, responde en la siguiente entrevista cuáles serán las responsabilidades que asumirá dicho grupo. Señala que ya se han establecido contacto con unos cinco laboratorios, en Estados Unidos, China y Reino Unido.

¿Quién tomó la iniciativa de formar este grupo y cómo así consiguieron que el gobierno acepte la idea?

Esto surgió a raíz de un artículo que publicó Raúl Delgado Sayán en Lampadia (portal que promueve “una sociedad de libre mercado”), hace un mes, más o menos. A mí me llamó la atención. Y luego un amigo en común me sugirió hablar con Raúl para ver si se podía materializar la idea. Cuando conversé con él, ya había dos personas más: el ingeniero Antonio Pratto, retirado, pero que ha trabajado internacionalmente en laboratorios y un doctor Luis Suárez Ognio, epidemiólogo, que ha organizado campañas de vacunación. Nos juntamos, nos hicieron una entrevista en un canal de cable y al día siguiente salió en un diario una carátula en donde estábamos los cuatro y nos llamaron el “Comando Vacuna”. A un hábil colega suyo se le ocurrió este nombre.

Según me cuenta, parece algo casi accidental.

Sí, sí. Nosotros habíamos dicho “vamos a hacer algo”, como cuando se juntan personas entusiastas. Raúl había investigado, nos explicó el asunto, yo me puse a leer y empezamos a ver la situación en vacunas. Había más de cien proyectos en carrera, uno en la tercera fase final, el de Oxford, y otros que estaban por llegar a esa tercera fase. Y nos empezamos a mover, a armar contactos. Pratto conoce gente en el mundo de los laboratorios.

¿Y de estos contactos iniciales con instituciones que desarrollan vacunas estaba prevenido el gobierno, o se enteró después?

No. Hace casi tres semanas me llamaron de Cancillería para decirme que se habían enterado de que estábamos en estos esfuerzos y que sería bueno coordinar, que ellos necesitaban un poquito de apoyo complementario. El ministerio de Relaciones Exteriores había avanzado con algunas conversaciones. En el caso de Estados Unidos, contactos muy preliminares con laboratorios, lo mismo que en Inglaterra. Llamé a la embajadora británica que estaba en Londres y le planteé la preocupación. Luego coordiné con el embajador en Washington. Y ya se hizo algo más institucional, para que no hubiera esfuerzos dispersos. Cancillería vio que podíamos dar un valor agregado. Nos hemos abastecido de artículos y de nombres de personas que se pueden contactar al otro lado.

Y el lunes, el presidente Martín Vizcarra lo mencionó como vocero.

Somos cuatro, ninguno es jefe de ninguno. La idea es articular esfuerzos.

En resumen, ¿ustedes empezaron por su cuenta, luego el gobierno se enteró y los llamó?

Exacto. Todos estamos enfrascados en el día a día, que los ventiladores, que el oxígeno, pero lo de las vacunas viene a futuro y hay que estar primero en la línea.

Entonces, su trabajo va a consistir en acopiar información, enterarse de cómo va el proceso de investigación de las vacunas y establecer contactos con personas a cargo de las investigaciones.

Y con empresas o universidades. Hemos abierto una red, aprovechado las relaciones que uno genera en su vida profesional. Yo quiero enfatizarle que no hay ningún ánimo secundario de obtener algún beneficio personal, ni nada. Nuestra preocupación y desesperación es ver tragedias humanas. Si se puede hacer algo, hay que hacerlo.

Sobre ese punto le consultaré después, porque ha habido algunas críticas.

Siempre hay.

Antes, quisiera definir sus funciones. Ustedes van a ver la manera de llegar a la vacuna, eso está claro. ¿Y negociar su compra también?

El que negocia es el gobierno. Nosotros no tenemos el empoderamiento para eso. Pero sí podemos apoyar para que se consiga esa vacuna, con consejos e información. Si nos enteramos de que hay algo avanzado, debemos advertir.

¿Y tendrán injerencia en la distribución de la vacuna? ¿0 sus funciones terminarán cuando el Perú la adquiera?

Bueno, el doctor Suárez ha participado en campañas de vacunación. Vamos a ayudar hasta donde nos permitan, porque tampoco podemos estorbar. Si vemos que no damos valor agregado, o si ya está resuelto el problema, pues ya está. Si es necesario apoyar en la logística, veremos cómo hacerlo. Las Fuerzas Armadas han sido eficientes en eso. Se trata de vacunar a la mayor parte de la población, esto es algo fuera de lo común.

Leí que la vacuna de Oxford ha logrado una correcta respuesta inmune en su última fase. Usted declaró que se podría probar en el Perú. ¿Qué clase de contactos han hecho?

Lo que queremos es que, apenas se encuentre disponible, estar en la primera fila. Se han hecho contactos con el gobierno británico. Oxford es una universidad pública.

¿Lo ideal sería que la vacuna se pruebe en el Perú?

Si es necesario. Si no, hay que estar primeros en la cola.

¿Se puede saber qué clase de contactos se establecieron con el gobierno británico?

Tenemos muy buena llegada, eso le puedo decir. Comprenderá que yo he estado involucrado en los juegos (Panamericanos) y eso me ha dado muy buenos amigos, en varios niveles. Hay que usar a los amigos.

También declaró que hay 10 a 12 laboratorios en la fase 3 y que se está tratando de llegar a ellos. ¿Ha habido algún avance al respecto?

Sí, hay avances. Nuestra embajada en Estados Unidos está conversando con dos. En China se tiene uno y hay otro por contactar. Se puede decir que ya hay hasta cinco contactos previos con laboratorios, y cada uno supone una estrategia diferente. Pratto conoce a personas en ellos. Es un mundo especial.

Pongámonos en el escenario más deseable: se consiguió la vacuna. ¿Cómo debería ser su distribución? ¿Gratuita?

En principio, yo creo que sí, que (la distribución de la vacuna) deber ser gratuita. Para las personas que no tienen ningún recurso, tiene que serlo. Y si hubiera que pagar, la cifra no es inmanejable, incluso se podía lograr que se haga un fondo del sector privado para subsidiarla. Los costos que estamos viendo en Oxford están entre 2.50 y 3.50 dólares la vacuna. Si a eso uno le agrega el transporte, no debería ser mucho más el costo final. No sé, póngale 5 o 6 dólares por vacuna. Como se trata de una pandemia, el mercado es el mundo. No es una enfermedad rara que eleva los precios.

¿Se debería dejar que la vacuna se comercialice en clínicas? Ya hemos visto lo que pueden llegar a cobrar por un paracetamol, ¿no?

No, no, pues. Vamos a ver cómo es la vacuna, pero sí tendría que controlarse bien eso, para que llegue (a la gente). Si lo ve desde el punto comercial, a todos nos conviene que todos estemos sanos y productivos. Si a usted le dan la vacuna, seguirá trabajando. Es una inversión preventiva muy eficiente. No hay mejor inversión que invertir en las personas.

¿Se podría cubrir a la mayor parte de la población o es una ilusión?

Lo ideal sería a todos. Pero si hay que priorizar, se debería empezar con los grupos vulnerables, como diabéticos, los que tienen enfermedades preexistentes, la tercera edad. Y con los más expuestos, como médicos, enfermeras, policías, soldados. Ayer (miércoles) estaba en un webinar internacional (conferencia en línea) donde se decía que la idea era que (la vacuna) se reparta a un 20% de la población mundial.

Regreso sobre lo que usted mencionó. He leído y escuchado ciertos reparos hacia este comando. El primero: la vacuna es un bien público y nadie se puede beneficiar de ella, sin embargo que integren el equipo personas con contactos privados a un muy alto nivel genera suspicacia de que alguien o alguna empresa intente aprovecharse. ¿Qué me dice?

Que mi hoja de vida dice lo contrario. Tengo 69 años y siempre me he cuidado de dejar una buena estela. No soy dueño de ninguna empresa, más allá de mi consultora. Lo que no puedo permitir es que mi país se deshaga sin activar mis contactos y relaciones para ayudar. Me parece muy mezquino. Se habla del país del palo encebado, que cuando uno trepa lo bajan. No pongo atención. Por esas cosas no me voy a detener.

Asumo que ha leído esas críticas.

Las he leído. Ya averigüé de quiénes vienen y las tomo como tal. A veces cuando uno saca la cabeza por encima, te quieren bajar.

¿De quién vienen las críticas?

Firman con su nombre.

Me ha hablado sobre usted. ¿Diría lo mismo de sus compañeros?

Conozco al ingeniero Delgado Sayán desde hace 40 años. Al ingeniero Pratto recién lo he conocido, pero su historia es pública. Y del doctor Suárez he escuchado las mejores recomendaciones. Todo mundo puede haber tenido un traspié en su vida, claro, o te pueden achacar algo que no hayas hecho. Eso es parte del deporte peruano.

Un segundo cuestionamiento tiene que ver con el ingeniero Delgado Sayán. El periodista Marco Sifuentes recordó que es presidente de Cesel, que fue supervisora en importantes obras relacionadas con el caso Lava Jato.

Mire, (Delgado Sayán) es un profesional de primer nivel, que no solo trabaja en el Perú sino en muchos otros países. Ya casi tiene 75 años. Ustedes saben cómo son las cosas en la prensa, a veces a partir de suspicacias se arma una gran historia.

A usted mismo lo han involucrado en lo de los supuestos aportes para la campaña de Lourdes Flores Nano.

Sobre eso, le quiero decir que nunca tuve ninguna reunión. Tengo mi conciencia bien limpia. Vivo en la misma casa desde hace 40 años.

Ahora que está involucrado en lo de las vacunas, ¿cómo considera que el gobierno ha manejado la crisis?

Nosotros queremos ayudar en este problema nacional que golpea a todos. La verdad, es un poco difícil… una cosa es estar en el ruedo, corriendo el riesgo, y otra cosa es mirar desde fuera. A nadie se le hubiera ocurriendo cómo iba a venir el toro y lo cierto es que nos agarró con el pie contrario. Solo para empezar uno puede echarle la culpa al gobierno, ¿pero qué hemos hecho nosotros en nuestras casas para cuidarnos? El gobierno no va a hacer todo. Se empezó muy bien, se controló al inicio y, claro, puede haber errores. Es bien difícil de decir…

¿Diría que el manejo de la crisis por parte del gobierno ha sido una mezcla de luces y sombras?

Bueno, empezamos bien, se tuvo algunos problemas y ahora se está recuperando el ritmo. Esto también tiene que ver con cómo es nuestra estructura, nuestro aparato estatal, que es un poco pesado para los procedimientos y cosas por el estilo. Es la oportunidad de revisar el Estado y mejorar su funcionamiento.

Pesado, de acuerdo. Sin embargo, también ausente, ¿no? No es solo un asunto de grasa acumulada, por decirlo de alguna manera, sino, además, de inexistencia, irrelevancia. ¿Qué piensa?

Es una mezcla. Es que la pandemia es a los 30 millones de peruanos y es bien difícil manejar eso. ¿Cómo hacemos para llegar a la gente que está en la punta del cerro? La economía informal es el 70%. Maniobrar así es imposible. Acá lo que se necesita es tratar de corregir la informalidad de la economía, ver qué acciones tomar. El Estado no necesariamente tiene que ser grande, sino fuerte y ágil. Nuestro aparato estatal es medio arcaico. Por eso digo que hay una oportunidad para mejorar. Felizmente logramos ahorrar bastantes fondos, sin embargo lo ideal sería que ya hubieran sido convertidos en infraestructura, como hospitales.

Usted como presidente de la Asociación de Centros Comerciales dijo que las pérdidas del sector que representa han sido cuantiosas. ¿Cree que la cuarentena fue necesaria?

En un inicio sí, pero llegó un momento en que fue rebalsada por la realidad. La gente salió de sus casas y La Victoria se convirtió en un foco infeccioso.

¿Usted hubiera levantado antes la cuarentena?

Probablemente. Es que son olas que van cayendo, una detrás de otra. (La cuarentena) se empezó a relajar un poco y la gente salió. Se permitió la producción de algunas fábricas, no la venta. Esa producción tenía que ir al mercado informal y eso congestionaba las calles. Eso se ha ido corrigiendo.

¿No teme que la apertura de centros comerciales eleve los contagios?

No creo, porque el gran contagio ha sido por el rebalse de la gente. Lo que esto hará es evitar que la gente vaya a un solo lugar. En los centros comerciales hay mucha más vigilancia y, por último, se cierran las puertas y ya no entra nadie. Hemos visto fotos de los mercados Unicachi y Huamantanga, hemos visto cómo eran, ¿no?

Yo le consulté al premier Vicente Zeballos si había habido algún tipo de lobby en la reapertura de los centros comerciales y lo negó. Imagino, usted también lo negará.

No, lo que ha habido es lo que ustedes han visto, cuando salíamos a los medios a explicar. Incluso sacamos un comunicado. Si a eso lo llaman ‘lobby’, bueno.

Solo pregunto.

Lo que hemos hecho es una comunicación mediática intensiva y hemos tenido reuniones de trabajo para explicar los protocolos.

¿Tiene pretensiones políticas serias para el 2021? Usted forma parte de un equipo del PPC que está buscando establecer una plataforma política bajo el nombre de Unidad Nacional.

Mi primera preocupación es mi país. ¿Aspiración política? Ya tuve intentos en los noventas, pero felizmente pude seguir con mi vida privada. Para ayudar no necesito un cargo.

¿No tiene pretensiones políticas al 2021? ¿Ni al Congreso?

Menos al Congreso. Debe ser aburridísimo estar ahí sentado escuchando discursos.

¿Presidenciales tampoco?

Hay otros que están con bastante puntaje. Yo ni siquiera aparezco. Ya sé a lo que va.

Se lo planteo así: si lo de las vacunas sale bien, podría darle un nuevo impulso, como pasó en su momento con los Panamericanos. Si usted empezara a aparecer en encuestas, ¿reevaluaría su posición?

Cuando me metí a lo de los Panamericanos estaba asumiendo un enorme riesgo personal. Muchos me llamaban a decirme que me compadecían y que lo dejara. Acá (en lo de las vacunas) he entrado sin ningún cálculo de nada, porque no puedo soportar lo que veo, que mis hijos y nietas deban enfrentar un futuro complicado.

¿Se animaría por una candidatura si subiera en encuestas?

Bien complicado eso.

¿Bien complicado que candidatee o que suba en las encuestas?

Mire, no me he puesto en ese escenario. Y no me lo pregunte, para no caer en la trampa verbal.

¿Qué supone un reto más desafiante? ¿Los Juegos Panamericanos o lo de las vacunas?

Es diferente. Yo vengo del mundo del deporte, me tocó presidir la Federación de Tabla y caí por default en la organización de los juegos, que fue algo bien complicado, aunque con un bonito final. Lo de las vacunas también es muy complicado, con la diferencia de que en esto nos jugamos otra cosa, algo más serio.

¿Es de vida o muerte?

Literalmente.

Newsletter COVID-19 en Perú de La República

Suscríbete aquí al boletín de La República y recibe a diario en tu correo electrónico toda la información sobre el estado de emergencia y la pandemia de la COVID-19.