Sociedad

UIGV suspende admisión en ocho carreras e inicia despido colectivo

Tensión. La U. Inca Garcilaso de la Vega retira a más de 300 empleados por “sostenibilidad financiera”. Sunedu dice que no ha solicitado ningún recorte. Ahora dictará clases solo en 7 locales.

Por Milagros Berríos

Tres años después de solicitar su licenciamiento, la Universidad Privada Inca Garcilaso de la Vega (UIGV) viene ejecutando una serie de acciones que han generado protestas e incertidumbre en un grupo de trabajadores, exempleados y alumnos.

Entre las principales medidas, y otras aún por implementar, están el inicio de un despido colectivo, el cambio de locales de las facultades y la suspensión del proceso de admisión en 8 carreras de pregrado este año.

Según la versión oficial de la universidad, estas acciones forman parte de su plan de adecuación para garantizar su sostenibilidad financiera ante la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu). Sin embargo, para otros miembros de la comunidad académica se trata de medidas arbitrarias que violan los derechos laborales y ponen en riesgo el servicio educativo.

Ante ello, exigen la salida del rector Luis Cervantes Liñán, quien permanece 15 años en el cargo y ha sido denunciado por ganar más de 2 millones de soles, piden la recomposición de órganos de gobierno y la intervención de la Sunedu para evitar perjuicios a los estudiantes.

Conflicto por despidos

Esta semana, la UIGV, con más de 50 años, comenzó con la entrega de cartas de despido a más de 300 trabajadores administrativos y obreros, contratados y estables, bajo el argumento de que el número de este personal “excedía largamente a los actuales requerimientos del servicio” y “generaba una carga laboral improductiva”. “Los criterios (para su retiro) se han basado en el uso de la tecnología, edades, o el no contar con una carrera profesional que les permita ser reubicados”, indicó la Oficina de Comunicaciones de la UIGV.

Esto ha sido rechazado por el sindicato de trabajadores no docentes, donde se asegura que la mayoría de afectados son profesionales, sindicalizados y de edades diversas, que han sido desvinculados de forma "arbitraria" y "sin evaluación".

“Ninguna universidad licenciada ha despedido a sus trabajadores. No hablamos de 5 o 10 personas, sino de cientos. Ni siquiera han pagado el mes de junio, ni la gratificación. Hay cabezas de hogar, con más de 20 años de servicio”, señala el secretario general del sindicato, Alexander Montejo, quien dice que la UIGV usa como justificación las exigencias de Sunedu.

Sobre esto, fuentes de la superintendencia aclaran que el proceso de licenciamiento no evalúa condiciones laborales, ni solicita recorte de personal.

La sostenibilidad financiera no es una Condición Básica de Calidad (CBC). Lo que se analiza con ese tema es si la institución cuenta con salud económica para mantener los estándares mínimos en el servicio. Los problemas de la universidad van más allá”, aseguraron.

Hasta enero pasado, la UIGV solo contaba con 1 de las 8 CBC básicas e incumplía con 19 de 44 indicadores, entre los que figuraban los referidos a planes de estudio, laboratorio, presupuesto, lineas de investigación, transparencia, entre otros.

Compartirán locales

Otra medida de la UIGV será lo que llaman la “optimización” de sus campus. Esto quiere decir que de los más de 15 locales -administrativos y académicos- solo impartirán clases en 7. El resto será destinado al desarrollo de proyectos como el de un instituto superior y uno de idiomas o alquileres. “Las facultades siguen siendo independientes. Lo que se hará es compartir los campus porque hay muchos espacios administrativos”.

A esta medida se suma la suspensión de ocho carreras de pregrado en el proceso de admisión 2019-2. Se trata de Negocios, Comercio exterior, Educación, Turismo y Hotelería, Ingeniería de Sistemas, Ciencias de la Comunicación, Ciencias Económicas y Contabilidad.

Esto ha sido confirmado por personal de la oficina de admisión, que refirieron que se trata de una decisión interna para "repotenciarlos" y "evitar mayores problemas". "Los que están ahí seguirán estudiando".

Estas acciones no han sido informadas a muchos estudiantes, quienes señalan al rector como responsable de las pérdidas económicas. "Estamos a la deriva. Tanto tiempo y dinero invertido, pero no sabemos qué pasará. Queremos que la universidad se licencie", indica José Ramírez, nuevo presidente de la federación estudiantil.

En tanto, de manera extraordinaria, la Sunedu viene visitando los locales de la UIGV para recoger evidencias sobre el levantamiento de observaciones (el plazo venció el 30 de junio). Esto tomaría entre una semana y 15 días. Tras ello, se hará un informe y se decidirá si pasa a una siguiente etapa.

Claves

- Hasta la tarde de ayer, el viceministerio de Trabajo no había recibido denuncias sobre la UIGV.

- Según la UIGV, muchas de las pérdidas económicas están vinculadas a la implementación de la Ley Universitaria.

- La Oficina de Comunicaciones dice que el pago de honorarios de junio se ha retrasado por “liquidez”.