Son siete piezas de oro, plata y bronce, y fueron decomisados por la Policía Nacional, y son de incalculable valor.,El arqueólogo de la Dirección Desconcentrada de Cultura (DDC) de Cajamarca, Francisco Esquerre Fernández, anunció que la zona del distrito de San Juan fue declarada como reservada para evitar nuevas acciones de huaqueo que dañen invalorables testimonios de culturas antiguas y vendidas en el mercado negro; esto luego en dicho lugar se hallaran siete valiosas piezas arqueológicas de incalculable valor. El estudioso recordó a La República, que a fines de abril, el Frente Regional de Cajamarca, en la persona del Coronel PNP Luis Cacho Roncal, puso en sus manos los valiosos objetos luego que fueran decomisadas recientemente por efectivos policiales a un campesino de la localidad de Chotén, cuyo nombre prefieren guarda en reserva a pedido de los abogados de este que -según confesó- por desconocimiento ya había vendido dos piezas más. PUEDES VER Obras repatriadas: Piezas arqueológicas y pinturas virreinales regresan al Perú [FOTOS] Esquerre Fernández mencionó que por las primeras investigaciones realizadas y las características de las piezas y el metal utilizado: oro, plata y bronce, se trataría de los arreglos de un personaje importante de alguna cultura mil años después de Cristo. Reveló que fueron siete piezas de metal de diversas formas encontradas: tipo casco o recipiente de incisiones al exterior, máscara con aretes, rostro humano con corona y arete, un cetro de 35 cm., con soporte punzante y tres esculturas de hombres guerreros donde se puede distinguir remando sobre una balsa, dos piezas pequeñas de forma circular y una de ellas doblada a media luna. “La zona no ha sido huaqueada en su totalidad, porque en una visita hemos comprobado que los alrededores permanece intacta, está ubicadas en la parte alta del distrito de San Juan, a la altura del cerro Gavilán, donde existe un abierto rocoso natural”, precisó. El experto refiere que el campesino confesó que para él fue fácil el hallazgo, por cuanto en sus labores de rutina le llamó la atención una especie de puerta sellada con mortero (piedra y barro), y por la curiosidad derribaron un muro sin necesidad de excavar, y al ingresar descubrieron alucinados las piezas arqueológicas.