Roberto Chiabra niega que un prófugo de la justicia maneje redes de su movimiento Unión y Paz
El congresista Roberto Chiabra rechaza denuncia de una excolaboradora de su movimiento político Unión y Paz.
El congresista no agrupado Roberto Chiabra niega que el hijo de su asesor principal, el general (r) Richard Pitot Guzmán, maneje las redes sociales del movimiento político Unidad y Paz, tal como denunció una exvoluntaria de dicha agrupación en redes sociales.
Según afirmó la excolaboradora de Unión y Paz, las redes de dicha agrupación eran manejadas por Renzo Frank Pitot Siancas, quien registra tres órdenes de captura por presuntos delitos de corrupción. Sin embargo, Chiabra rechaza dicha declaración.
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“Si (ella) dice que el hijo de este señor me maneja mis redes sociales y las redes sociales del movimiento, es una mentira pues. Y a mí me ha hecho daño. (...) ¿Yo que tengo que ver con el hijo? El papá tampoco tiene nada que ver con el hijo porque no vive con él. Tiene 40 o 41 años”, dijo.
El exmilitar también asegura que quien maneja las redes de Unión y Paz es Eduardo Farro: “Yo sí sé quién es Eduardo Farro. ¿Eduardo Farro sabrá quién es Paulo? No creo, no creo que lo conozca”. “El único Paulo que conozco es el que trabaja en mi despacho”, indicó al referirse a Paulo Alvarado Siancas, asistente de su oficina congresal.
Roberto Chiabra. Foto: LR/Archivo
Reuniones partidarias
Chiabra considera que es imposible que la denunciante Mari Benavente pueda afirmar que trabajadores de su despacho hacen actividades partidarias debido a que “ha venido solo dos veces”.
“Una con los chicos (de Juventudes), que tuve una reunión con jóvenes que hablamos sobre la coyuntura política justo en febrero, se había dado el golpe, estábamos en el estallido social. Y otra que ella me pide hablar sobre su renuncia. ¿En qué momento ella detectó que había reuniones partidarias? Primero, no tengo partido. (…) Estamos en proceso de conseguir la firma”, argumenta.
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Asimismo, reitera que Benavente no fue trabajadora de su despacho, sino voluntaria de su movimiento político Unión y Paz.
“Si ella no laboraba acá, ¿cómo puede haber advertido que había una participación activa de los asesores y había actividades partidas en el despacho? ¿En qué momento?”, agregó.
Sorpresa
Chiabra expresó su “sorpresa” debido a que, afirma, el trato con Mari Benavente, así como la presunta denuncia en redes, se da luego de que renuncia a Unión y Paz.
“Me sorprende porque cuando uno tiene relaciones de respeto mutuo, no hay problema. Me sorprende el trato que ella tiene conmigo después del cambio (renuncia)”, añade.
