Política

Congreso: elección de la Mesa Directiva evidencia la ambición por el poder

La oposición no se pone de acuerdo ante eventual vacancia de Castillo e inhabilitación de Boluarte: lista de Camones dispuesta a renunciar, mientras que Renovación y Avanza País anhelan el Gobierno. Expertos dan su lectura del panorama

Camones, Medina, Acuña o Echaíz relevarán a María del Carmen Alva. Foto: Composición de Jazmín Ceras/ Congreso
Camones, Medina, Acuña o Echaíz relevarán a María del Carmen Alva. Foto: Composición de Jazmín Ceras/ Congreso

Las bancadas del Congreso son conscientes de que este martes 26 de julio no solo se disputa la Mesa Directiva 2022-2023, sino eventualmente la presidencia de la República. Ante una anunciada moción de vacancia contra Pedro Castillo y una acusación constitucional contra Dina Boluarte, el camino parece estar llano para que el próximo presidente del Congreso asuma el Ejecutivo.

En total son cuatro listas que aspiran a dirigir el Parlamento. Las cabezas son Lady Camones (APP), Héctor Acuña (Cambio Democrático), Esdras Medina (Renovación Popular) y Gladys Echaíz (Renovación Popular).

Pese a sus marcadas posturas críticas al Gobierno de Pedro Castillo, la oposición no logró consensuar una fórmula. Fuerza Popular respalda a Camones, quien lleva a Martha Moyano en la primera vicepresidencia. En tanto, en Renovación Popular y Avanza País surgieron pugnas internas por la postulación de Echaíz.

Avanza País se fracturó: una parte está dispuesta a respetar el acuerdo político de 2021 y apoyar la lista que lidera la apepista, mientras que el sector más radical insiste con que la exfiscal de la Nación sea la presidenta interina.

Renovación Popular optó por ir con una lista en conjunto al sector extremista de Avanza País. Pero no contarían con el voto de Esdras Medina, impulsor de las contrarreformas educativas que lleva en las vicepresidencias a Waldemar Cerrón (Perú Libre), Ilich López (Acción Popular) y Kathy Ugarte (Bloque Magisterial).

Los números no mienten y estos auguran —un nuevo— desastre para la bancada celeste. Sin acuerdos con otras agrupaciones, el único logro al que aspira Renovación Popular en este momento ya no es la presidencia del Congreso, sino superar los ínfimos 10 votos que obtuvo la lista liderada por Jorge Montoya en 2021.

Las nóminas con más opciones para pasar a la inminente segunda vuelta son las de Lady Camones y la de Esdras Medina.

Ambición de poder

La lista de Lady Camones, respaldada por el fujimorismo, firmó un compromiso para, en caso sean elegidos como Mesa Directiva, renunciar si es que Pedro Castillo y Dina Boluarte no puedan seguir ejerciendo sus cargos. No obstante, desde Renovación Popular y Avanza País han expresado su anhelo para que Gladys Echaíz asuma el Gobierno en el citado escenario.

Para la politóloga Paula Távara, ello es “muestra de angurria y de interés particularísimo” y que dichas agrupaciones “no son capaces de ponerse de acuerdo ahora mismo en cuál sería la salida”.

“Ni siquiera es que el objetivo les sea lo más importante, ‘vamos a unirnos todos para alcanzar vacar a Castillo’. Es el puesto lo que le resulta más importante. Es una muestra del Parlamento que tenemos, incapaz de ponerse de acuerdo en lo programático, en las prioridades del país y ni siquiera en su propias prioridades. Siempre terminan teniendo la pata coja del interés personalísimo de obtener la mayor cantidad de poder posible”, explicó Távara a La República.

El politólogo Alonso Cárdenas coincide con esta posición y precisa que “la ambición por el poder está desde que antes que Castillo asuma la presidencia”.

“Estas bancadas, el fujimorismo y sus satélites, ni siquiera quisieron reconocer los resultados de la elección, petardeando todo el sistema democrático con una clara ambición de poder. Hay una clara línea de desorden con ambición de poder, es decir, una ambición de poder desordenada”, apuntó Cárdenas a este medio.

Asimismo, el especialista considera que, pese a los desencuentros entre las agrupaciones de derecha, el discurso crítico contra el Gobierno no variará.

“Una crítica furibunda en la retórica, pero de muy poco contenido en el fondo. Los respiros al Gobierno, cuando parecía que ya colapsaba, se los dio el Congreso. La mejor aliada era María del Carmen Alva y la mejor asesora política de Pedro Castillo. Creo que esta dinámica va a continuar por el problema de fondo: el sistema de representación política y la extrema debilidad de los partidos políticos”, agregó.

Por su parte, Távara adiciona: “Probablemente, le van a seguir atacando en este tiempo de gestión, pero sí le dan una cierta tranquilidad de que si se pelean entre ellos, divide y reinarás. No diría que el Gobierno podría seguir pasando ‘piola’, pero sí podría continuar con un Congreso con el que al final sus faltas pasen inadvertidas”.