China logra lo impensable con su tren bala: 52 millones de pasajeros abandonan aerolíneas frente a rapidez y comodidad
Mientras las aerolíneas ofrecen 55 vuelos diarios entre Pekín y Shanghái, el tren de alta velocidad de China opera más de 100 servicios, con mayor puntualidad, conectividad y salida desde el centro urbano.
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En el trayecto de 1.300 kilómetros que une Pekín con Shanghái, el tren bala chino ha superado ampliamente al transporte aéreo. En 2024, más de 52 millones de pasajeros optaron por el tren de alta velocidad, frente a los 8,6 millones que utilizaron vuelos, según datos del South China Morning Post. Factores como la rapidez del servicio, la conectividad a internet y la puntualidad han contribuido decisivamente a la preferencia por el ferrocarril.
El modelo más moderno, el CR450AF, ya fue presentado por China Railway y se espera que alcance 450 km/h en 2027. Actualmente, cubre el trayecto Pekín-Shanghái en 4 horas y 18 minutos. En días normales, más de 100 trenes circulan entre ambas ciudades, con servicios cada pocos minutos. Mientras tanto, las aerolíneas chinas, como Air China y China Eastern Airlines, luchan con medidas desesperadas: servicios de limusina y boletos flexibles.
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Así desplazó los trenes chinos a las aerolíneas (y por qué Europa no lo logra)
El éxito del tren de alta velocidad en China responde a una ecuación simple: rapidez, frecuencia, conectividad y fiabilidad. Los trenes no solo parten y llegan desde los centros urbanos, como Shanghai Hongqiao, sino que además garantizan conectividad digital constante. Esto último es esencial para los viajeros de negocios en China, quienes valoran mantenerse conectados y productivos durante todo el trayecto.
En contraste, el transporte aéreo en China enfrenta retrasos frecuentes por control de tráfico impredecible y condiciones meteorológicas. Europa, pese a tener infraestructura avanzada como el AVE o el TGV, aún no logra una adopción similar. Las tarifas aéreas siguen siendo más competitivas y la fragmentación ferroviaria impide replicar el modelo chino con la misma eficacia.
Del déficit a los 12.800 millones: el milagro financiero de la línea Pekín-Shanghái
Durante sus primeros años, la línea sufrió pérdidas operativas, pero hoy es un caso de éxito económico. En 2024, China Railway reportó ingresos por 42.000 millones de yuanes (unos 5.800 millones de dólares) y ganancias netas por 12.800 millones (casi 1.800 millones de dólares), un crecimiento del 10% anual.
Este rendimiento contrasta con otras rutas ferroviarias del país, especialmente en provincias poco pobladas, donde las líneas siguen siendo deficitarias. Sin embargo, el tráfico entre las dos principales ciudades del país ha convertido esta conexión en la más rentable del sistema ferroviario chino. El desafío ahora es escalar este modelo a otras regiones con igual eficiencia.






















