Quién es Dominique Mamberti, el cardenal que dijo 'Habemus Papam' para dar a conocer al nuevo Papa en el Vaticano
Mamberti, de 73 años, se ha destacado por su amplia trayectoria diplomática en el Vaticano, desempeñándose en importantes misiones en el extranjero y consolidando su lugar en la Curia.
- ¿Quiénes son los 23 cardenales latinoamericanos que votarán en el próximo cónclave papal? Brasil, Argentina y México lideran la lista
- ¿Qué significa el humo negro en el cónclave? Esta es la explicación tras un símbolo clave en la elección del papa

El próximo anuncio del nuevo pontífice desde el Vaticano estará en boca de Dominique Mamberti, un cardenal francés de trayectoria diplomática impecable, quien a sus 73 años asumirá uno de los momentos más simbólicos de la Iglesia católica. Como protodiácono, tiene el privilegio exclusivo de salir al balcón central de la Basílica de San Pedro y pronunciar el tradicional “Habemus Papam”.
La elección del nuevo papa ocurrirá en el marco del cónclave que inicia este 7 de mayo, cuando 133 cardenales electores menores de 80 años se reúnan en la residencia de Santa Marta. Desde allí, y bajo estrictas medidas de aislamiento, comenzarán las votaciones en la Capilla Sixtina para escoger al sucesor de Francisco.
TE RECOMENDAMOS
MÁS PERUANOS CONTRA FUJIMORI: LO QUE SE LE VIENE A KEIKO | LA VERDAD A FONDO CON PEDRO SALINAS
PUEDES VER: ¿Quién será el sucesor del papa Francisco? Estos son los candidatos favoritos para el cónclave del Vaticano

Una carrera diplomática forjada en el corazón del Vaticano
Dominique Mamberti nació el 7 de marzo de 1952 en Marrakech, Marruecos, y fue ordenado sacerdote en Francia en 1981. Su formación incluye estudios en Ciencias Políticas y Derecho Público, una base académica que marcó su ingreso al cuerpo diplomático del Vaticano en 1986. Desde entonces, ha ocupado cargos en Argelia, Chile, el Líbano y en la Misión Permanente de la Santa Sede ante la ONU en Nueva York.
En el año 2000 fue convocado a Roma como consejero de la Secretaría de Estado. Más adelante, en 2002, asumió como nuncio apostólico en Sudán, Eritrea y Somalia. Su perfil técnico y su capacidad de gestión internacional lo llevaron a ser designado por Benedicto XVI en 2006 como secretario para las Relaciones con los Estados, es decir, el jefe de la diplomacia vaticana.
Durante la década que ejerció esa función, Mamberti gestionó relaciones internacionales en escenarios complejos, como Oriente Medio, África y las organizaciones multilaterales, ganándose la reputación de un diplomático sobrio, eficaz y leal a la estructura eclesiástica.
La cercanía con el Papa Francisco y su rol clave en la Curia
En 2014, ya durante el pontificado del Papa Francisco, Dominique Mamberti fue designado como prefecto del Tribunal Supremo de la Signatura Apostólica, la instancia judicial más alta del Vaticano después del propio papa. Poco después, recibió el birrete cardenalicio, consolidando así su lugar dentro del Colegio Cardenalicio.
Aunque su nombre no aparece entre los principales candidatos al papado, su posición como cardenal protodiácono lo convierte en protagonista de uno de los momentos más esperados tras cada cónclave: el anuncio del nuevo pontífice. Mamberti es considerado un hombre de confianza del difunto Francisco, con quien mantuvo una relación fluida y profesional.
Este rol no solo exige un protocolo preciso, sino también una presencia serena, capacidad de representación y sentido institucional. Mamberti cumple con todos esos requisitos, siendo respetado por su perfil reservado y su compromiso con la diplomacia vaticana.
PUEDES VER: Cónclave en el Vaticano: ¿Cómo se elegirá al nuevo papa y los detalles del sistema de votación?

¿Cómo se elige al nuevo papa y qué papel cumple Dominique Mamberti?
El cónclave, que se celebra tras la muerte o renuncia de un pontífice, sigue un protocolo que ha perdurado por siglos. Los cardenales electores, en este caso 133, deben permanecer completamente aislados sin acceso a medios de comunicación ni contacto con el exterior. El juramento de secreto se extiende también al personal auxiliar.
Las votaciones comienzan con una ronda el primer día y pueden alcanzar hasta cuatro por jornada. Para que haya elección válida, un candidato debe reunir al menos dos tercios de los votos. Si no hay consenso, se queman las papeletas con productos que generan fumata negra. Si se elige a un nuevo papa, la quema produce fumata blanca, visible desde la Plaza de San Pedro.
Una vez aceptado el cargo por el nuevo pontífice y elegido su nombre, se retira a la Sala de las Lágrimas, donde se viste con la sotana papal. Posteriormente, Dominique Mamberti sale a la logia central de la Basílica y pronuncia la frase en latín: “Annuntio vobis gaudium magnum: Habemus Papam”. Luego, el nuevo líder de la Iglesia aparece para impartir la bendición Urbi et Orbi ante miles de fieles.


















