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Paramédica fue a socorrer a víctima de un accidente mortal y descubre que era su propia hija

“Era una luchadora y luchó hasta el día que murió. Y era hermosa... era tan hermosa. Si alguna vez se esforzaba en algo, lo lograba”, contó la madre.

La paramédica Jayme Erickson no sabía que la víctima a la que intentaba salvar su vida era su propia hija. Foto: canadatoday.news
La paramédica Jayme Erickson no sabía que la víctima a la que intentaba salvar su vida era su propia hija. Foto: canadatoday.news

Una paramédica canadiense acudió al rescate de una joven que sufrió un accidente mortal al norte de Calgary. Jayme Erickson trató de emergencia las heridas de la víctima, quien lucía irreconocible tras haber sido sacada del auto. Posteriormente fue llevada al hospital, donde falleció.

Al llegar a su casa, los agentes de la Real Policía Montada de Canadá le dieron la lamentable noticia a Erickson: la joven que horas antes había ayudado era Montana, su hija de 17 años.

“Era una luchadora y luchó hasta el día que murió. Y era hermosa... era tan hermosa. Si alguna vez se esforzaba en algo, lo lograba”, dijo Erickson en una estación de bomberos en Airdrie, Canadá, con familiares, paramédicos, policías y bomberos parados detrás de ella como muestra de apoyo.

Paramédica fue a socorrer a víctima de un accidente mortal y descubre que era su propia hija

Erickson compartió su dolor con los periodistas el martes por la noche y describió a su hija como un éxito en todo lo que se proponía. Foto: kutv.com

Richard Reed, un amigo y paramédico de vuelo, perdió la compostura varias veces mientras contaba cuando Erickson fue al lugar en donde el vehículo perdió el control y fue impactado por un camión de frente.

Reed contó que el conductor del auto logró salir tras el choque, pero la pasajera quedó atrapada con lesiones graves. La paramédica Erickson fue la primera persona en llegar al lugar y auxilió rápidamente a la joven sin saber quién era.

“En el camino de regreso expresó su dolor y frustración a su compañero, sabiendo que después una familia probablemente perdería una hija, hermana y nieta. Poco tiempo después de llegar a casa, tocaron en la puerta. Era la RCMP”, dijo Reed.

“Al entrar al cuarto, para su horror, se enteró de que la joven con quien se sentó en la parte trasera del vehículo para mantenerla viva para que la familia pudiera despedirse, y quien debido a la gravedad de sus lesiones era irreconocible, era la propia hija de Jayme”, agregó. “Jayme, sin saberlo, mantenía viva a su propia hija”.